Alexa es el asistente personal más popular en muchas partes del mundo, España incluida, y por una buena razón: también es el más inteligente para muchos usuarios. Aunque el Asistente de Google es mejor para algunos, Alexa ha conseguido hacerse un hueco gracias a la gran cantidad de funciones y conexiones con otros servicios.
No podemos obviar tampoco el papel que los dispositivos Echo han tenido para popularizar una idea que, en su día, parecía una tontería. Aunque hoy estamos acostumbrados a pedir lo que necesitamos en voz alta, en los inicios de Alexa era algo ridículo.
Y no lo pensábamos sólo nosotros; el propio Jeff Bezos estaba muy frustrado con Alexa, hasta el punto de que se enfadaba con el sistema a menudo.
Esa es una de las revelaciones del último libro de 'secretos de Amazon'; aunque parece que todos los meses sale uno parecido, en esta ocasión el firmado por el periodista Brad Stone parece que trae algunas 'perlas' que no se conocían hasta ahora, muchas relacionadas con el asistente personal Alexa.
Como por ejemplo, la identidad de la persona detrás de la voz. En efecto, la voz de Alexa es humana, y no artificial, aunque eso no significa que una persona tenga que decir todas las frases que puede decir el asistente; sería imposible, dada la cantidad de frases únicas que reproduce a diario en todo el mundo.
La voz de Alexa se creó en base a la voz de una persona real; los algoritmos de Amazon se encargan de sintetizar las frases de manera natural, a partir de las muestras de voz aportadas por una actriz.
Según Stone, esa actriz no es otra que Nina Rolle; es comprensible que el nombre no te suene y de hecho, probablemente sea así aposta. Rolle no es una actriz con una gran cantidad de roles importantes; según su página web, está especializada en narrar anuncios televisivos, aunque desde 2012 también trabaja en audiolibros.
Ni Amazon ni Rolle han confirmado la revelación del libro de Stone, pero es verdad que las muestras publicadas por la actriz se parecen mucho a la voz original de Alexa en inglés. Por supuesto, desde entonces Alexa ha evolucionado mucho, ganando nuevos idiomas y tonos.
Bezos insultó a Alexa
Pero esa no es la única curiosidad sobre Alexa que Stone ha publicado. Aparentemente, la voz era lo único que iba bien en Alexa al principio; el libro habla de una época de frustración en la empresa y especialmente, en Jeff Bezos, el fundador de la compañía.
Una anécdota cuenta cómo Bezos llegaba a insultar a Alexa cuando no funcionaba bien; en un momento incluso llegó a decirle que se pegase un tiro, después de que Alexa no diese la respuesta correcta. Aparentemente, esto fue escuchado por ingenieros que estaban trabajando en lo que, por aquel entonces, se llamaba proyecto "Doppler".
En ese momento, Bezos perdió completamente la esperanza en crear un asistente inteligente, y creía que el proyecto estaba acabado; no era el único: cientos de empleados de Amazon probaron el prototipo y tampoco quedaron muy entusiasmados, afirmando que "no funcionaba una mierda".
Pero Amazon consiguió mejorarlo, hasta el punto de crear un producto comercial con Alexa y el primer dispositivo compatible en 2014. El resto es historia: ya se han vendido más de 100 millones de dispositivos, y es el asistente líder.