Mientras transitaban en la colonia Bosques Sur, en Nuevo
Laredo, un autobús que trasladaba a agentes de la Policía Estatal de Tamaulipas fue atacado a balazos por miembros del crimen
organizado, quienes emplearon armas del alto poder; hasta ahora no se ha
reportado ningún herido.
Tal ataque ocurrió a las 21:40 horas del martes 6 de julio, mientras el autobús era custodiado por patrullas de la misma corporación, al atravesar la carretera Monterrey-Nuevo Laredo -que es conocida como 'la carretera de la muerte'- justo a la altura de la calle Cerro de las Campanas.
Según lo referido por las autoridades, los elementos de
las patrullas repelieron la agresión de los sujetos armados, quienes dispararon
contra el transporte de pasajeros; los uniformados que viajaban en la unidad no
estaban en activo, pues se dirigían a tomar unos días de descanso.
La refriega causó temor entre los pobladores, quienes al
escuchar las detonaciones corrieron a refugiarse a los locales y casas de las
inmediaciones. Ni policías ni civiles resultaron heridos durante el
tiroteo; sólo hubo daños materiales: una patrulla resultó con el motor averiado
y los neumáticos ponchados.
El tramo carretero entre Monterrey-Nuevo Laredo es
considerado como peligroso, debido a que más de 80 personas han desaparecido
en éste a lo largo de 2021. Los automovilistas también han grabado numerosos
asaltos.
De acuerdo con especialistas, el tramo carretero es vigilado
por sicarios del Cártel del Noreste (CDN), quienes buscan impedir la
expansión del Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) en el noreste
del país.
Este acto violento se suma a los que han elutecido a
Tamaulipas en meses recientes, en especial el ocurrido el pasado 19 de
junio, cuando criminales masacraron a 15 civiles en plena vía pública
y sin que estos tuvieran nexo alguno con el crimen organizado.