Dustin Wakefield, de 21 años de edad, se encontraba cenando junto su familia en un restaurante ubicado en Miami Beach, Estados Unidos, cuando fue asesinado de varios disparos mientras protegia a su hijo del ataque.
Según medios como El Nuevo Herald, testigos y
familiares de Wakefield relataron que el joven padre fue
sorprendido por un sujeto, quien sin motivo aparente, sacó un arma de
fuego y apuntó a su pequeño hijo, de apenas un año de edad. El asustado padre
abrazó a su bebé para protegerlo del ataque con arma de fuego.
El asesino, identificado posteriormente como Tamarius
David, de 22 años de edad, le disparó tres veces, y luego celebró su
crimen bailando sobre el cuerpo de Dustin Wakefield.
Posteriormente, el asesino salió corriendo y trató de
esconderse en un callejón, pero minutos más tarde fue capturado por la
policía.
Aunque Wakefield recibió primeros auxilios por parte de los
policías, ya nada pudieron hacer por salvarle la vida.
Ya en poder de las autoridades, Tamarius David
aceptó su crimen y reveló que se había drogado con hongos y eso
lo hacía sentirse empoderado, lo que lo motivó a elegir una víctima al
azar.