Médicos cubanos denunciaron que las brigadas de salud que organiza su gobierno para exportar talento a otros países y ofrecer ayuda humanitaria, en realidad se trata de esclavitud moderna, pues son amenazados con sepáralos de sus familias, dejarlos sin ingresos o meterlos a prisión si no regresan a Cuba.
Durante una conferencia de prensa organizada por la asociación Prisioners Defenders, tres médicos narraron los abusos que sufrieron durante su misión.
Los médicos que deciden no regresar a Cuba tras concluir su misión son considerados desertores y se les aplica la “ley de 8 años” que consiste en extraditarlos, encarcelarlos y separarlos de sus familias.
Idalma Leyva Domínguez, presidenta del Gremio Médico Cubano Libre, narró su experiencia cuando fue convocada para prestar sus servicios en Brasil, de 2017 a 2018.
La médico afirmó que cuando el gobierno de Brasil denunció las irregularidades que sufrían los médicos cubanos, el régimen dio la orden de que regresaran al país, sin embargo, un grupo, ella incluida, decidió quedarse.
“El gobierno cubano no tiene corazón, no es un gobierno humanitario, porque de un día para otro dejó a Brasil sin médicos”, sostuvo.
Fue en ese momento cuando comenzaron las presiones a su familia.
Dijo que a los “desertores”, los hacen ver como lo peor y por ello siempre la represalia es contra las familias. Por ejemplo, contó que a su hija la molestaban en la escuela, a su hijo lo despidieron del trabajo y su madre sufrió un ataque de hipertensión por el acoso del régimen, pues soldados iban constantemente a su domicilio.
Leyva Domínguez dijo que el gobierno de Cuba le notificó que si no regresaba al país la separarían de su familia. Esto orilló a que tanto sus hijos como su madre viajaran a Brasil, de manera irregular, para reunirse con la doctora.
El médico Emilio Arteaga, quien estuvo de misión en África, dijo que el trato del gobierno a los médicos es como si fuesen soldados, pues están concentrados en una especie de campamento.
“Las presiones psicológicas, los chantajes emocionales, la imposibilidad de relacionarte con otras personas que no sean miembros de la colaboración médica, especialmente con el personal cubano que radica ahí en esos respectivos países, donde son desplegadas las brigadas médicas cubanas. Le tienen terror a los cubanos que viven en esos países y que son libres y viven por su cuenta allá”, dijo Arteaga, quien ahora reside en España.
El médico Omar Tamayo, quien estuvo en una misión en Haití, narró que los médicos que son aceptados en misiones se van sin sus títulos profesionales para garantizar que regresen a la isla. Además que el salario que les pagan no alcanza para vivir en los países en donde prestan sus servicios.
Aunque estuvo a punto de no regresar, finalmente terminó su misión por miedo a represalias y posteriormente escapó con su familia.
En la conferencia, de manera remota, también estuvo presente Dita Charanzova, vicepresidenta del Parlamento Europeo, quien aseguró que las brigadas médicas representan la mayor partida de ingresos del gobierno cubano, mediante prácticas de persecución, esclavitud moderna y amenazas.
“Está probado que más del 80% del dinero que Cuba cobra por la brigadas va a parar al régimen y no al bolsillo de los médicos cubanos, que viven en condiciones de esclavitud moderna y todo tipo de violaciones de sus derechos humanos. Llevar médicos en estado de esclavitud viola la legislación internacional sobre el trabajo y perpetua el sistema de explotación y separación familiar forzosa”, dijo Charanzova.
Tanto médicos como miembros del Parlamento Europeo hicieron un llamado para que otros países dejen de suscribir convenios para que médicos cubanos vayan de misión.
Médicos cubanos en México
El pasado 9 de mayo, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que, ante el déficit de personal médico en el país, llegó a un acuerdo con Cuba para contratar a más de 500 médicos de esa nación para trabajar en México.
Esta decisión ha desatado una oleada de críticas debido a que médicos mexicanos han expresado su desacuerdo ante la decisión, pues afirman que en el país sí existe personal médico que está deseoso de ejercer en el país, sin embargo, el gobierno no garantiza sueldos adecuados y sobre todo seguridad para ellos o sus familias.