Yasmín Esquivel Mossa manifestó su intención de seguir en su cargo como ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y negó tener motivos para sentirse avergonzada ante las acusaciones de plagio, de modo que continuará participando y votando los asuntos del máximo tribunal.
“Continuaré, por supuesto, trabajando intensamente. Y hoy más que nunca, por la dignidad de las personas, defendiendo la Constitución y los derechos humanos, así como los principios democráticos de México”, dijo Esquivel Mossa a un reportero de Milenio luego que la Secretaría de Educación Pública (SEP) decidió no tomar acciones sobre el título profesional de la actual ministra.
Yasmín Esquivel Mossa fue propuesta en marzo de 2019 por el presidente Andrés Manuel López Obrador como ministra de la Suprema Corte, cargo que mantendrá hasta el primer trimestre de 2034.
Como ministra, Esquivel podrá preservar el fuero constitucional que le impide ser juzgada, además de contar con las remuneraciones y prestaciones que otorga uno de los puestos de mayor jerarquía en el Estado mexicano.
De acuerdo con datos del gobierno federal, un ministro de la Corte gana mensualmente 284 mil 500 pesos y entre las prestaciones más importantes se encuentra el aguinaldo, por 585 mil 613 pesos.
El periodo de Enrique Graue ha sido señalado por muchas situaciones al interior de la comunidad universitaria (Infobae México/Jesús Abraham Avilés Ortiz)
En su última declaración patrimonial, Esquivel Mossa reportó ingresos por 3 millones 911 mil 279 pesos anuales, por parte de la SCJN, mientras que sus ingresos por actividades empresariales fueron de poco más de medio millón de pesos.
De mantenerse por los 11 años restantes del periodo para el que fue designada, Esquivel Mossa tiene garantizados 42 millones de pesos por concepto de sueldo y aguinaldo.
Sin embargo, su permanencia podría estar en duda en caso de que la UNAM y la SEP implementen un proceso administrativo para retirarle el título debido al caso de plagio en que se vio envuelta la ministra.