A golpes e insultos se llevó a cabo la elección del nuevo dirigente del partido Morena en Nuevo Casas Grandes, donde Julián Alejandro Hernández Chávez suplía a Indhira Ilse Ochoa Castillo, incidente por el que horas después el proceso fue invalidado ayer por la propia líder estatal, Myrna Brighite Granados de la Rosa.
Fue ayer al mediodía cuando la exdirigente del Comité Municipal de Morena convocó a rueda de prensa para presentar a Julián Hernández como el nuevo presidente del partido, advirtiendo que pese a la inconformidad de otros militantes, el proceso no lo podía invalidar más que la dirigencia nacional o el directivo estatal.
Una hora después, la propia presidenta estatal de Morena declaró de manera pública que el proceso en Nuevo Casas Grandes queda invalidado, ya que no sólo se llevó a cabo sin las formas ni los tiempos que marcan los estatutos del partido y del propio Instituto Nacional Electoral (INE), sino que el proceso fue una imposición donde un grupo de “morenistas” irrumpió el evento de manera violenta.
En réplica a las declaraciones de Indhira Ochoa y Julián Hernández, los miembros activos de Morena e integrantes del Comité Municipal sostuvieron otra reunión para descalificar el proceso que se llevó a cabo, en primera porque de manera legal la elección debe convocarla la dirigencia estatal y dentro de los tiempos que marca el INE, que es hasta el próximo año después de la jornada electoral, para que se validen a los miembros que van a intervenir en la asamblea.
Asimismo está el hecho de que a la supuesta asamblea hayan llegado “morenistas” a los que nunca habían visto, a quienes luego identificaron como trabajadores de la oficina de Bienestar, quienes por su actitud tenían el objetivo claro de “reventar” el evento y desplazar con violencia a los miembros del comité, para luego realizar su elección “a puerta cerrada”.
Más allá de sus facultades
En principio de cuentas, los miembros del Comité Municipal indicaron que Indhira Ochoa ni siquiera debió haber convocado a una asamblea extraordinaria, ya que no le corresponde a ella sino al comité, sin contar con que ya había renunciado y eso le resta toda autoridad, por lo que a todas luces el proceso no cumplió los estatutos en muchas formas.
En este sentido y viendo que la presidenta del comité manifestó su renuncia, se anunció que no es el nuevo “electo”, Hernández Chávez, quien queda al frente de Morena, sino la suplente oficial de Ochoa, la actual secretaria del Comité, Daniela Gómez Avena.
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