Tres fueron los planteamientos de esta mañana en la conferencia de prensa desde Palacio Nacional: el presidente Andrés Manuel López Obrador está bien y goza de cabal salud.
Así lo reiteró, como un mantra, “el hermano” y aspirante a la presidencia de la República, Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, ante la prensa que no se creyó del todo que fuera Covid-19 lo que motivó que López Obrador haya cancelado una gira de trabajo en Yucatán.
De manera oficial, fue un malestar respiratorio, presentado desde el sábado y agudizado el domingo, y que al ser analizado resultó en Covid-19, lo que mandó al reposo obligado al presidente de la República.
Fue el Diario de Yucatán el que desde ayer ha asegurado que el tabasqueño habría sufrido un infarto cuando se disponía a desayunar y por lo cual habría sido traslado de emergencia en un jet de la Marina a la Ciudad de México para ser evaluado.
“No (no sufrió un infarto), no hay nada de eso, goza de cabal salud. Él mismo lo dijo ayer, está al 100%, en cuanto a su salud cardiaca y yo creo que a nadie debe de asustar el que haya resultado con contagio de Covid, el presidente convive con muchos ciudadanos, seguramente alguno lo contagió y ahora está aislado, recibiendo atención y guardando reposo”, sostuvo López Hernández.
Aunque el mandatario trató de desmentir un padecimiento mayor en su cuenta de Twitter, el mensaje sólo planteó más dudas sobre la enfermedad que lo aquejó ayer y que motivo la suspensión de una gira de supervisión a las obras del Tren Maya en Yucatán.
Hoy, de manera tajante y ante los reiterados cuestionamientos de la prensa, Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, arremetió contra aquellas voces “malquerientes” que desean el mal al presidente de la República; no obstante, afirmó que el jefe del Ejecutivo federal se encuentra al frente de las decisiones del país.
“Como lo he venido diciendo, son maledicencias, eso quisieran ellos (los malquerientes), reitero, el presidente goza de cabal salud, con los síntomas propios de un tercer contagio de Covid-19, como él mismo lo informó y está en plena recuperación y seguramente en los próximos días reanudará de manera normal, sus actividades.
“El presidente está bien, goza de cabal, salud y seguramente está el pendiente de todos los asuntos del Estado mexicano y seguramente en los próximos días estarán nuevamente reanudando sus actividades de manera cotidiana”, sostuvo López Hernández, quien evadió varios cuestionamientos.
Aunque ofreció más detalles, como que López Obrador está en aislamiento en Palacio Nacional y cuenta con alrededor de cuatro dosis de la vacuna contra el Covid-19, la prensa reunida en el Salón Tesorería no se quedó satisfecha.
Al pedir que el mandatario federal grabara un mensaje para conocer de viva voz su estado de salud, López Hernández concedió que será una alternativa que evaluaran, sin embargo, pidió detener las especulaciones sobre la salud del primer mandatario.
El año pasado, tras la filtración de correos electrónicos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) por el grupo Guacamaya, López Obrador confirmó que padeció angina de pecho inestable de alto riesgo a principios de 2022, así como gota e hipotiroidismo, enfermedades que controla con medicamentos.
De acuerdo con esos documentos, el mandatario federal sufrió angina de pecho inestable de alto riesgo a principios de 2022 mientras estaba en su finca de Palenque, Chiapas, por lo que fue trasladado al Hospital Central Militar de urgencia.
En 2013, cuando era opositor, Andrés Manuel López Obrador sufrió un infarto agudo al miocardio que fue tratada con urgencia y que tras una intervención quirúrgica el hoy jefe del Estado mexicano pudo sobrellevar de manera favorable.
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El titular de la Segob dijo que el diálogo con la Suprema Corte será institucional. Foto: Gobierno de México.
Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, aseguró que el diálogo con los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) será institucional luego de que el viernes, el presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó a los miembros de su gobierno “ni contestar el teléfono” al Poder Judicial.
“De manera institucional será la relación, ahora mismo, por ejemplo, podría comentarles que la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, a propósito de un anuncio que se ha hecho en los últimos días y en las últimas horas.
“Respecto a una marcha que estaría dirigida hacia o su ruta terminaría en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ha solicitado por la vía oficial e institucional, mediante un oficio a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, que se le proporciona apoyo con Guardia Nacional para salvaguardar las instalaciones y ya se acordó un tratamiento institucional a esa petición, entonces de esa manera seguirá siendo la relación con la Suprema Corte de Justicia de la Nación”, sostuvo el secretario.
El viernes, desde Veracruz, el presidente López Obrador rompió con la Suprema Corte al revelar que su presidenta, Norma Piña, trató de negociar con el gobierno federal el lapso en el que la Guardia Nacional se debería desincorporar de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
La semana pasada, el pleno de la Corte declaró inconstitucional que la Guardia Nacional, creada con figura civil, haya sido trasladada de manera operativa y administrativa a la Sedena. Al respecto, el mandatario federal comentó que Norma Piña, con quien mantiene diferencias desde que asumió la titularidad de la Suprema Corte, intentó negociar con la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) la fecha para la desincorporación.
“No se puede acatar porque entra en vigor hasta en enero del año próximo, se arrepintieron, en vez de que ordenaran que entrara en vigor de inmediato, empezaron ahí a decir que por qué no se negociaba para que entrara en vigor después, no, le dije al Secretario de Gobernación y a la Secretaria de Seguridad Pública ‘no’, nada de negociación, esto tiene que ver con dignidad, nosotros no hacemos arreglos en lo oscurito”, reveló el viernes AMLO.
– ¿Quién mandó ese mensaje?, cuestionó el mandatario federal.
“La presidenta y otros Ministros, querían (negociar), les dije: ‘ni les contesten el teléfono, ni les contesten el teléfono. Ayer tenía un desayuno la secretaria de Seguridad Pública con la presidenta de la Corte, entonces cuando me enteré les dije: no quiero ningún enjuague, ya no es el tiempo de antes.
“Porque quiero enviar la iniciativa de reforma a la Constitución, porque quiero que sea el pueblo el que decida, no puede ser que una élite corrupta sea la que decida un asunto tan delicado como es la seguridad de la gente, ya se acabó la política cupular, ahora el pueblo manda. Entonces, no hay negociaciones como las que se acostumbraban antes”, detalló López Obrador el viernes.
