La mexicana Teresa Alonso, subcampeona de natación artística en los pasados Juegos Panamericanos, rompió el silencio para denunciar el acoso que sufrió por parte de su entrenadora Adriana Loftus.
Tal acoso provocó que la atleta fuera a dar al hospital, por lo que no calló más y ventiló esa terrible situación que vivió.
"Me hizo bullying; me decía gorda, chaparra y de piernas cortas; fui su costal de boxeo. Sufrí sangrado de tubo gástrico, oriné y evacué con sangre y cuando estaba en el hospital, sólo me escribió para preguntar cuándo iba a regresar a los entrenamientos", dijo a EFE.
Alonso quiso contar la situación que vivió en busca de que autoridades hagan algo y ya no exista más acoso, pues dice que también sus compañeras Karen Soto y Madison López fueron víctimas.
"Cuando mostraban los resultados de exámenes, mis números estaban normales. Sin embargo, ella me decía: tienes bien el porcentaje de músculo y grasa, pero yo te veo gorda. Karen Soto estaba destinada a ser la mejor de nosotras, la próxima capitana del equipo, pero fue a parar al hospital con mononucleosis, a raíz de los trastornos alimenticios que nos provocaron; Madison López sufrió cólera; se arrancaba los sueros para irse entrenar, pero después renunció al equipo".
Teresa Alonso explicó que su estatura de 1.60 metros es similar a la de algunas atletas japonesas, pero eso era un pretexto para que su entrenadora le dijera cosas malas.
"Me decía que no podía competir en dueto, por chaparra y si destacaba con mi buena técnica, me minimizaba. Sostener giros se me facilita, ella, en vez de decirle a las demás chicas que subieran el nivel, a mí me pedía bajarlo porque me hacía notar".
"La violencia de esta entrenadora es algo patriarcal, machista; la exigencia no es igual a la violencia... Sufrí bullying como el que le hacen a algunas chicas en la secundaria".
¿Quién es Teresa Alonso?
Una gran atleta mexicana de nado sincronizado en la última década, tiene finales en Mundiales, medallas de plata en los Panamericanos de Toronto 2015 y Lima 2019; además, tres de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe del 2018.
Es estudiante de Ingeniería Electrónica y actualmente está fuera del equipo nacional desde 2020, cuando denunció los abusos, pero sigue al tanto de la realidad de sus excompañeras, a quienes criticó por su falta de solidaridad y por aparecer en una campaña para vender trajes de baño porque supuestamente no tienen dinero.