Bryan Johnson, un empresario ultrarrico de 45 años que vive en Venice, California, está desafiando al envejecimiento mediante un equipo con más de 30 médicos y expertos en salud que supervisan todas sus funciones corporales, según publicó Bloomberg. ¿Su objetivo? Tener un cuerpo de 18 años.
Y es que su equipo, liderado por el especialista en medicina regenerativa Oliver Zolman, se comprometió a revertir el proceso de envejecimiento en cada órgano de Johnson, a quien utilizan como conejillo de indias para los tratamientos experimentales más prometedores y que han requerido millones de dólares en inversión. Este año, Johnson planea gastar al menos 2 millones más en su físico.
Así, este hombre de mediana edad sigue pautas estrictas en cuanto a su dieta, ejercicio y sueño, como reporta Bloomberg. Cada mañana toma dos docenas de suplementos y medicinas, seguidos por sesiones de entrenamiento con 25 ejercicios distintos.
También monitorea constantemente sus signos vitales y se somete a numerosos procedimientos médicos todos los meses, algunos bastante dolorosos. Según los médicos, este trabajo empieza a dar resultados: los estudios muestran que el cuerpo de Johnson está rejuveneciendo.
Bryan Johnson redujo de este modo su edad biológica en al menos cinco años. Su corazón corresponde a un hombre de 37; su piel, a uno de 28 años, y su capacidad pulmonar y estado físico son comparables a los de un joven de 18 años. Sin embargo, Zolman advierte que su trabajo con Johnson está en una etapa inicial y que tienen muchos procedimientos por explorar.
De acuerdo con Bloomberg, esta decisión de Johnson surgió tras crear durante sus treintas una empresa de procesamiento de pagos llamada Braintree Payment Solutions LLC, que fue un gran éxito. Sin embargo, las jornadas largas le causaron sobrepeso y una profunda depresión, hasta llegar al borde del suicidio.
Por ello, en 2013 vendió su negocio por 800 millones de dólares y comenzó un largo viaje para reconstruirse a sí mismo; primero fundó una empresa enfocada en biotecnología, y eventualmente empezó a experimentar con su propio cuerpo.
Lo anterior le ha valido algunas críticas, pues lo han acusado de tener un desorden alimenticio o psicológico, o bien de abordar la vida de una forma aburrida y restrictiva.
Mientras que algunos expertos respetados en longevidad y envejecimiento afirman que inevitablemente se abrirá un foro sobre la ciencia de extender la vida y elogian los esfuerzos de Johnson. Por su parte, este millonario comparte sus logros a través de su propio sitio web y espera someterse a procedimientos más experimentales.