Este lunes se reunieron obispos y arzobispos de Michoacán para pedir, desde la Catedral de Apatzingán, por la paz y por las víctimas de la violencia. Los líderes religiosos, además, exhortaron a los aspirantes a algún cargo de elección popular a “no hacer alianzas con grupos criminales, alianzas de sangre”.
La misa por la paz y por las víctimas de la violencia fue encabezada por el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, y los obispos de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García; de Lázaro Cárdenas, Armando Ortiz; auxiliar de Zamora, Francisco Figueroa, y de otras provincias eclesiásticas y sacerdotes de las diversas diócesis.
El anfitrión, Cristóbal Ascencio, agradeció la presencia de la congregación católica para pedir, unidos, por la paz y por las víctimas de la violencia en Michoacán y en el país.
Agradeció la iniciativa que tuvieron los obispos de comenzar su encuentro anual con el objetivo “de promover la paz y la reconciliación y al mismo tiempo, que oramos por las víctimas de la violencia “.
Afirmó que todas las diócesis tienen necesidad de paz, “pero es significativo, que nuestra Tierra Caliente ha vivido y sigue viviendo situaciones extremadamente preocupantes de violencia”.
Enfatizó que tienen contempladas posibles soluciones pacíficas ante la situación imperante de la violencia.
Ascencio García destacó la resiliencia social, que a pesar de todo lo vivido, el pueblo y las comunidades, han aprendido a sacar fortaleza de la fe vivida con generosidad.
“Y como aspectos desfavorables, no podemos ocultarlos. Están presentes, la violencia, la corrupción y las desigualdades sociales. Estamos viviendo la manifestación de una violencia infrahumana, pues los grupos delincuenciales, han secuestrado sin control a muchas de nuestras comunidades, con índices de violencia desconocidos hasta ahora”, señaló el obispo de Apatzingán.
Dijo, que la impunidad ante la violencia y el crimen, son otros de los factores adversos que padecen los pueblos y las comunidades.
“Pero también la impotencia de la sociedad ante las múltiples injusticias, han generado una cultura de desconfianza en las instituciones públicas y una corrupción generalizada”.
Violencia, el ancla de la pobreza
Expuso que la violencia ha impedido también realizar los trabajos en el campo, lo que no permite a las familias salir de la pobreza.
“Y desde luego, al cobro de piso, a ojos vistos, que de alguna manera afecta a todos, pero más, a quienes menos tienen. Por eso los pastores no dejamos de alzar la voz y esto, no solo implorando a Dios, sino también, para exigir a todos y a todas, el cese de tanta violencia y de tanta impunidad”, resaltó.
Sostuvo, que son muchas las víctimas de la violencia en esa provincia, entre ellas, varios sacerdotes.
“Hoy oramos juntos por todas sus víctimas, por sus familiares y dolientes. Pareciera que no encontramos cómo salir de esta situación tan dolorosa. Por eso, hoy más que nunca, necesitamos unir nuestros esfuerzos, nuestras manos solidarias, abrir nuestros oídos para escucharnos y animarnos a hacer fuerza común, contra todo aquello que atenta contra la humanización de la sociedad”, refrendó el religioso.
En la celebración eucarística, el obispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, indicó que como provincia hacía tiempo que querían expresar este signo de solidaridad, de cercanía y de acompañamiento, a su hermana diócesis de Apatzingán, ante la violencia que azota a esta región.
“Señor: danos la paz: a tu pueblo la paz y que esa expresión de dar la paz, no solo sea a quien nos trata bien a los amigos, a quien les son cercanos y de confianza, sino dar la paz (también) al enemigo”, conminó.
Garfias Merlos consideró que, para alcanzar la paz, es necesario para la Iglesia Católica, “dialogar, vincularnos y plantear los temas de dificultad, hacer el discernimiento necesario y llevar las acciones precisas, que nos ayuden a caminar juntos”.
“Que oportuno será hacer el camino entre los líderes religiosos de nuestra iglesia católica, con los demás líderes de otras religiones, para hacer este camino de diálogo y más allá: atendamos a las víctimas; acompañemos a todos aquellos que resultan víctimas de la violencia y que de manera inocente son agredidos u ofendidos”, mencionó.
Mujeres, promotoras de la paz
Destacó que es fundamental que las mujeres se hayan convertido en promotoras de la paz. “Cuánto debemos en nuestra cultura, al compromiso y responsabilidad de las mujeres. Respetemos, cuidemos a las mujeres y promovámoslas para que sigan haciendo posible, que construyamos la paz entre nosotros”, destacó.
Carlos Garfias, reiteró que “construyamos la paz, amando a nuestros enemigos y espero que este encuentro nos lleva a todos para que nos comprometamos a construir la paz. Que este sea el mejor propósito que nos llevemos de esta eucaristía”.
Ante medios de comunicación, los líderes religiosos hicieron un llamado a los criminales para que se reconviertan, se acerquen a la iglesia y se puedan reintegrar a la sociedad.
“Y quienes no se conviertan, que se les castigue como corresponde y como está establecido en nuestra Constitución”, enfatizó, el obispo de Morelia, Carlos Garfias.
Sin pactos criminales
A pregunta expresa, los líderes religiosos pidieron a los aspirantes a cualquier cargo de elección popular, no hacer alianzas en este proceso electoral, con ningún grupo criminal, con tal de ganar una elección.
También llamaron a las autoridades a garantizar el libre voto de la ciudadanía y sin coacción de fuerzas delictivas.
“A mis hermanos de algún partido político que intentarán esto (hacer pactos con criminales para ganar una elección), yo les digo que, por el bien de la sociedad, no mezclen con el crimen; no hagan alianzas, porque estas alianzas son alianzas de muerte en un futuro inmediato y después”, señaló el obispo de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García.
Invitó a los aspirantes, a “no hacer alianzas, ni pactar; con el crimen no se pacta. Así le digo a mis hermanos de cualquier partido político: no hagan alianzas con nadie del crimen, porque esto generará, ya en las elecciones y después, más violencia”.
Cristóbal Ascencio, recordó que hacer alianzas con el crimen, es exponer a la sociedad a que siga esta cadena de violencia y derramamiento de sangre.
“Por eso mi llamado a todos los partidos políticos y a quienes estén pensando en esta posibilidad (de hacer alianzas con el crimen organizado) ni pensarlo”.
Dijo que como ciudadano y como pastor, espera que haya unas elecciones libres, para que los ciudadanos puedan elegir libremente a su candidato.
“Y que no se vean obligados por el crimen que los vigila que voten por algún candidato. Que nadie se vea obligado a votar por quien algún grupo del crimen quisiera tener como su futuro representante o su futuro gobierno”.
“Entonces, si queremos a México, todos los ciudadanos hemos de buscar la mejor opción para quien pueda ayudar, en este México que casa ve es más violento, porque la paz es de todos, pero no podemos prescindir del papel tan importante de nuestras autoridades”, advirtió.
El obispo pidió, en ese sentido, que “hay que estar preparados para salir a votar y desde luego, decirle ‘no a las alianzas de muerte’; no a las alianzas que derramarán más sangre”.