La Universidad Estatal de Colorado (CSU) ha publicado su pronóstico anual para la temporada de huracanes en el Atlántico de 2024, y las predicciones nos obligan a poner atención.
El pronóstico indica que la temporada será “extremadamente activa”, con un número significativamente mayor de tormentas con nombre, huracanes y huracanes mayores que el promedio.
Es importante recordar que solo se necesita un huracán para que una temporada sea considerada “activa”. Independientemente del pronóstico, los residentes costeros deben estar preparados cada temporada.
¿Cuándo empezará la temporada de huracanes 2024?
La temporada de huracanes 2024 comienza el 1 de junio. Es importante que los residentes costeros tomen las medidas necesarias para estar preparados y protegerse a sí mismos y a sus familias.
¿Cuántos huracanes mayores habrá en el Atlántico el 2024?
Se espera que haya 23 tormentas con nombre, de las cuales 11 se convertirán en huracanes. De estos, 5 alcanzarán la categoría 3 o superior, lo que se considera un huracán mayor. Estos números son considerablemente más altos que el promedio anual de 14 tormentas con nombre, 7 huracanes y 3 huracanes mayores.
Los principales factores que influyen en este pronóstico son: la transición de El Niño a La Niña durante el verano, lo que generará condiciones de viento favorables para la formación de tormentas en el Atlántico.
Las temperaturas cálidas de la superficie del mar en el Atlántico oriental y central, que se encuentran en niveles récord o cercanos a ellos. Las aguas cálidas son esenciales para la formación y el desarrollo de tormentas tropicales y huracanes.
La tendencia a las aguas cálidas del Atlántico continuará durante la temporada de huracanes, que se extiende del 1 de junio al 30 de noviembre.
Las condiciones actuales de El Niño probablemente evolucionarán a La Niña en el verano/otoño, lo que generará condiciones de cizalladura del viento favorables para la formación de huracanes.
Las temperaturas de la superficie del mar en el Atlántico oriental y central se encuentran en niveles récord y se espera que se mantengan muy por encima del promedio durante la temporada de huracanes. Un Atlántico tropical más cálido de lo normal crea un ambiente más favorable para la formación e intensificación de tormentas.