Algo que ninguna madre debería presenciar fue lo que tuvo que vivir una mujer en la colonia Francisco Silva Romero, en San Pedro Tlaquepaque. Y es que esta madre localizó a su hija, de 25 años, enterrada en un pozo. Pero la situación empeoró porque la mujer no sólo perdió a un familiar, sino a dos, ya que la víctima estaba embarazada.
La joven, cuyo cadáver fue encontrado semi enterrado dentro de una casa, fue reportada como desaparecida el 10 de mayo, y tras buscarla por más de una semana, varias pistas llevaron a su madre hasta una finca entre las calles Libertad y Derecho, donde logró entrar y corroborar la terrible noticia: su hija, que llevaba en el vientre un bebé de cinco meses, estaba muerta dentro de una fosa.
¿En qué tipo de casa localizaron a la víctima en Tlaquepaque?
De acuerdo con autoridades municipales, el sitio donde estaba la joven tenía señales de ser un lugar utilizado para la suministración o ingesta de estupefacientes (drogas). No estaba deshabitada, pues adentro encontraron a tres personas que fueron arrestadas por la Policía de Tlaquepaque.
“Se llama a servicios de Protección Civil y Bomberos para efecto de que verifiquen y efectivamente, se trata de una mujer. Una vez que encontramos y nos confirman e hicimos el llamado al Ministerio Público para pedir mando y conducción y a las personas que se encontraban en el interior. Se les puso a disposición en espera de que inicie la investigación”, señalaron las autoridades.
La zona fue acordonada por elementos de la policía municipal, así como de la Fiscalía de Jalisco que abrió en un solo día, la segunda carpeta bajo el protocolo de feminicidio en el Área Metropolitana de Guadalajara.
Siguen los feminicidios en Jalisco
Además de la víctima anterior, se localizó el cadáver de otra mujer en una calle de Zapopan. La joven fue abandonada envuelta en cobijas en la colonia Agua Fría.
Así como si fuera cualquier cosa, vecinos de las calles Roble y Clavel reportaron haber encontrado un bulto envuelto en una cobija con silueta humana. Pero lo que no dejó dudas de que se trataba de una persona, fue que sus pies, los cuales calzaban unos huaraches, se asomaban por un extremo.
Las autoridades fueron alertadas y policías municipales llegaron al camino de terracería donde, en una de las orillas, localizaron a una mujer de entre 25 y 30 años, muerta y con signos de ahorcamiento, así como otras huellas de violencia, todo esto debajo de la manta que la envolvía.
Aún se desconoce la identidad de esta víctima y si contaba ya contaba con ficha de desaparición. Será el Instituto de Ciencias Forenses quien realice el peritaje correspondiente para determinar la causa de muerte, mientras que la Fiscalía de Jalisco abrió una nueva carpeta bajo el protocolo de feminicidio.