Gracias a las redes sociales, los internautas han podido descubrir personalidades inspiradoras y con historias y vida que contar. Ahí, la figura de Katy Cardona destaca no solo por su carisma y energía, sino también por la forma sincera con la que ha compartido la experiencia de ser madre.
Desde que anunció su embarazo, la influencer ha convertido sus redes en una ventana hacia la realidad de la maternidad, con sus momentos luminosos, pero también sus incertidumbres y toda la gama de cambios físicos y emocionales que conlleva traer una vida al mundo.
Tras iniciar su trayectoria en redes durante la pandemia, Katy se había ganado muchos seguidores a través de contenido variado como tutoriales de maquillaje, reseñas de restaurantes y productos, videos de humor y baile.
Sin embargo, fue cuando se convirtió en madre cuando vivió un gran cambio, mismo que describe como "una montaña rusa de emociones", donde ha debido balancear sus compromisos profesionales con las exigencias de cuidar un bebé.
Lo que más ha cautivado a sus seguidoras es su capacidad de hablar sin tabúes de temas que a menudo se evaden como temores, noches sin dormir ni un solo minuto, cambios hormonales y hasta la alegría de ver a su hijo sonreír por primera vez.
De esta forma, su comunidad se compone de mujeres que se identifican con sus vivencias. La gran conexión se puede ver en los comentarios de sus videos y publicaciones, donde abundan mensajes que agradecen su franqueza y el apoyo emocional que brinda a quienes pasan por la misma etapa.
Pero también existen límites, Katy explica que, si bien disfruta compartiendo el proceso y subrayando su parte más humana, también considera vital resguardar ciertos momentos familiares y conservar una parcela de privacidad. Entiende que las redes sociales pueden ser un arma de doble filo y prefiere mantener a su hijo al margen de discusiones que no aporten a su formación.
Otro aspecto relevante es el apoyo de su pareja. Desde el inicio de su relación, ambos han mostrado gran complicidad frente a la cámara y en la vida real. Así, han transmitido un mensaje de unidad y de corresponsabilidad en el cuidado del bebé, rompiendo con estereotipos de género y demostrando que la crianza es un trabajo de equipo.
Asimismo, Katy no descuida su faceta altruista, pues considera que el amor que ahora experimenta con la maternidad debe reflejarse en una mayor empatía hacia los demás. Por ello, sigue adelante con proyectos de ayuda a animales abandonados y mantiene abiertas las convocatorias para emprendimientos que desean publicidad. Incluso en un momento tan exigente a nivel familiar, no deja de pensar en cómo aportar su "granito de arena" para transformar positivamente el entorno.
Actualmente, Katy acumula más de tres millones de seguidores tan solo en Instagram.
El propósito del contenido es seguir tejiendo puentes con las madres que necesitan orientación y motivación. Para Katy, la maternidad es un pilar más en su crecimiento personal y profesional, no un obstáculo. Reconoce que ha debido adaptarse, replantear horarios y a veces renunciar a ciertos proyectos, pero cree que la recompensa es inmensurable. Cada día, despierta con la convicción de que su labor como influencer puede servir de aliento a otras mujeres que, como ella, atraviesan el cambio de vida más determinante de todos.
Katy Cardona se ha convertido en un referente para quienes desean mirar la maternidad con ojos de valentía y realismo, sin perder la capacidad de sonreír. Al abrir las puertas de su día a día con tanta honestidad, ha demostrado que se puede ser madre, profesional, pareja y creadora de contenido al mismo tiempo, siempre y cuando exista amor, organización y el apoyo suficiente.
