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Indiana.- La "niña" Natalia, cuyo caso resonó en días pasados, que había sido abandonada por sus padres adoptivos que aseguran que era en realidad una mujer de 22 años haciéndose pasar por niña y llegó a intentar matarlos, ha sido adoptada nuevamente por una familia cristiana que vive en el estado de Indiana (EEUU).
En 2010, Natalia había sido adoptada por la familia Barnett cuando presuntamente tenía la edad de ocho años. Ellos sabían que ella había nacido en Ucrania y desde el 2008 se encontraba en Estados Unidos tras haber sido abandonada sin razones por su anterior familia, además de padecer una rara especie de enanismo que le impedía crecer.
Sin embargo, dos años más tarde, su familia adoptiva decidió mudarse a Canadá, dejándola a su suerte en un departamento en Lafayette (Indiana) cuya renta ya había sido pagada, sin darle ningún otro tipo de apoyo económico. La "menor" fue hallada dentro del inmueble cuando los dueños se disponían a desalojarlo por falta de pagos.
El hecho movilizó a las autoridades, que acusaron a Kristine Barnett y su exmarido Michael Barnett de negligencia por abandonar una menor de edad. La pareja, no obstante, defiende su inocencia y aseguran que fueron víctimas de fraude, pues la niña en realidad era mucho mayor de lo que decían.
Natalia era una mujer, Tenía la regla. Dientes de adulto. Nunca creció ni una pulgada, algo que puede ocurrir incluso en niños con enanismo", asegura Kristine.
La mujer explicó que las pruebas de densidad ósea que le realizaron a Natalia demostraron que tenía mínimamente 14 años, y los doctores que la trataron confirmaron que su condición psicológica tenía síntomas que solo se diagnostican en adultos, según Daily Mail.
Sin embargo, contra todo lo esperado, la presunta niña ha encontrado un nuevo hogar en el seno de una familia de fe cristiana y bastante devota que decidió adoptarla en 2016, al enterarse del revuelo en torno a su fecha de nacimiento que habría sido alterada en Ucrania para darle mejores oportunidades. Incluso un tribunal llegó a confirmar que Natalia nació realmente en 1989 y no en 2003 como decía su anterior acta de nacimiento.
Pese a la confusión en torno a su verdadera edad e identidad, la devota pareja de Antwon y Cynthia Mans consideran a Natalia como una más de su familia; la visten como a una niña pequeña y la llevan con ellos y sus cinco hijos a las actividades de la iglesia.
El nuevo padre adoptivo, Antwon, de 36 años, se ordenó como pastor recientmente y reside con su familia en una antigua casa parroquial de la iglesia.
Los Mans se preocupan por Natalia y le gusta estar allí. No hay nada loco pasando ni nada. Estas son buenas personas", relata una amiga del matrimonio de Indiana.
"Por casualidad se encontraron con esta persona que no estaba siendo tratada correctamente y se preocuparon lo suficiente como para esforzarse por asegurarse de que algo se hiciera al respecto. Si es verdad que sus padres la habían abandonado, es horrible", agregó.
Otro amigo de la pareja detalló que intentaron hablar con los anteriores padres adoptivos de Natalia y pasar por los tribunales, pero el asunto no se ha esclarecido del todo aún. El gran impacto mediático que ha tenido el caso de Natalia ha dificultado las cosas para su nueva vida.
En realidad, hay cosas muy limitadas que pueden hacer por ella porque la gente dice que tiene 30 años. Ni siquiera puede ir a la escuela secundaria".
La familia cristiana ha compartido a través de su redes sociales imágenes de su nueva vida junto a Natalia, quien por cierto tiene actualmente dos certificados de nacimiento: uno que señala que es menor de edad y otroa que sostiene que tiene más de 20 años.
Su nueva acogida contrasta drásticamente con la anterior, donde su madre adoptiva pasada aseguraba que la niña era en realidad una menor y sufría una sociopatía que la llevó a amenazar con asesinar a su familia.
"No podíamos dormir. Tuvimos que esconder todos los objetos punzocortantes. La vi poner sustancias, lejía o algo así, en mi café, y cuando le pregunté: '¿Qué estás haciendo?', ella dijo: 'Estoy intentando envenenarte".
Pese a que en 2012 un tribunal del Condado de Marion determinó que la menor había nacido en realidad en 1989, el pasado 19 de septiembre se emitió una orden de arresto contra los Barnett acusándoles de abandono infantil. Actualmente Kristine y Michael se encuentran en libertad tras haber pagado una fianza de 5 mil dólares. El pasado 24 de septiembre debían presentarse a su primera audiencia ante la corte de Lafayette; se desconoce qué sucedió allí.
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