La operación para el Grito de Independencia en el Monumento a la Bandera ocasionó perjuicios a decenas de comerciantes y una lluvia de quejas de transeúntes y trabajadores.
El cierre de calles ocasionó que no trabajara una sucursal de Banamex, lo que afectó a cientos de meridanos. Empleados dijeron que se dejaron de hacer entre 1,000 y 1,200 operaciones bancarias. Ayer los empleados tuvieron que hacer guardias a las puertas del banco e indicar a los clientes que no abrirían.
El cierre ocasionó también que bajen las ventas del comercio en la zona entre un 20 y un 60%. Los más afectados fueron negocios de las plazas Oasis y Plaza Cristal.
Un cuidador de coches de Plaza Cristal dijo que anteayer, un día antes del desfile, tuvo el peor día debido a que nada más ganó 25 pesos, cuando en días de quincena obtiene de 350 a 400 pesos.
Los clientes de un supermercado de la misma plaza tenían que caminar casi medio kilómetro para ir a buscar el autobús, al igual que las personas que trabajaban en Paseo de Montejo, cerca del Monumento a la Bandera hasta la Glorieta de Burger King.
Agentes de la SSP dispusieron el cierre de ambas vías de la avenida que confluyen al Monumento a la Patria. Al Sur se cerró a partir del monumento a Justo Sierra O'Reilly y al Norte a partir de la glorieta de la colonia México. Por el Oriente, en la calle 27 con 58-A, y en el Poniente, a partir de la glorieta de San Fernando.
