venta ambulante, porque sabe que en su mayoría necesitan ganar unos pesos para el sustento diario, pero propone que las autoridades municipales les brinden financiamiento para establecerse en la economía formal.
Este esquema de financiamiento, explica la agrupación, sería similar al que ya aplica el Ayuntamiento en otros sectores productivos. Así se controla el ambulantaje, se suman más recursos a la economía formal, gana el sistema tributario y la Comuna recupera los recursos.
El secretario del Ayuntamiento, Santiago Altamirano Escalante, admite que el San Benito no cumple la función para la cual fue construido y subraya la necesidad de estrategias y promociones para llevarle más gente.
Durante una entrevista, de la que ayer publicamos la primera parte, el dirigente indica que la Cámara ha propuesto al Ayuntamiento que financie a esos vendedores, de la misma forma en que se apoya a otros sectores productivos, para que puedan impulsar un negocio que les permita salir de la clandestinidad.
El secretario del Ayuntamiento, Santiago Altamirano Escalante, explica que con los ambulantes se trata de aplicar un esquema similar al de los tianguistas repartidos en los parques de la ciudad.
-Si no podemos impedir que se ocupen esos espacios (los parques), por razones sociales, al menos ponemos orden en ellos -abunda-. Les cobramos un derecho considerando que tenemos que hacer frente a los gastos que genera el uso que le dan a esos lugares ellos y sus clientes, como energía eléctrica, pintura o reparación de bancas, etcétera.
Altamirano Escalante subraya que no se trata de avalar la actividad del ambulante, pues es ilegal y se le seguirá combatiendo con todos los medios legales de que dispone la Comuna.
Incluso, recuerda que el Tianguis Navideño instalado junto al Museo de la Ciudad es una de las medidas adoptadas para hacer frente al problema del ambulantaje que se recrudece en estas fechas, pero al terminar diciembre desaparecerá.
Ayer publicamos amplia información sobre la presencia de los ambulantes en el Centro Histórico de Mérida. De acuerdo con la Canacome, la venta callejera no sólo causa problemas de imagen y de competencia desleal al comercio establecido sino que genera enorme boquete al sistema tributario.
Manzanilla Pérez recuerda que el ambulantaje llegó a representar un serio problema en los últimos meses de la segunda gestión de Ana Rosa Payán Cervera como alcaldesa. En ese entonces había en las calles hasta 2,800 vendedores.
-Ahora no sabemos cuántos hay, pero no podemos esperar que el problema empeore -señala-. Creemos que el Ayuntamiento está tomando las medidas correctas.
A su vez, Altamirano Escalante recuerda que el mercado San Benito fue construido para abatir el problema del ambulantaje, pero no ha cumplido esa función.
Para llevar más gente a ese edificio, recalca, se requieren nuestras estrategias en las que ya está trabajando el Ayuntamiento.- Angel Noh Estrada
@angelovaliant
La invasión de calles que se observa en estas fechas es un problema cíclico.
2004: Hasta 2,800 ambulantes trabajan en el Centro Histórico.
2005: Abre sus puertas el mercado San Benito. El objetivo: albergar a los ambulantes.
2006: Notoria reducción en el número de vendedores.
2010: Las calles, invadidas de nuevo al final de la gestión de César Bojórquez. Al cierre del año, el problema es mayor.