Un centenar de jóvenes realizó ayer una protesta pacífica, pero ruidosa, frente a las instalaciones del circo Atayde para que no se utilicen animales en los espectáculos circenses.
Los jóvenes escribieron en pancartas el sufrimiento de las especies cautivas y, desde una malla ciclónica, gritaron a los espectadores que no entren al lugar porque estarían apoyando el maltrato de los animales.
"Ustedes pagan y los animales sufren", gritaba desde la acera América Méndez Avila, estudiante de preparatoria.
"Esto no es una diversión, es violencia contra los indefensos animalitos", repitió varias veces. "Mejor vayan y lleven a sus hijos al cine".
Mucha gente ignoró las llamadas de atención del grupo y entró al circo.
No hubo enfrentamientos verbales ni físicos entre empresarios circenses y manifestantes. Alrededor de 15 auxiliares de seguridad de la agrupación Federación Mexicana estuvieron atentos a la protesta. El personal de seguridad contratado por la empresa portaba macanas.
También llegaron dos patrullas de la Secretaría de Seguridad Pública, cuyos agentes recabaron información de quienes participaron en la manifestación, tomaron algunos nombres y tras un diálogo con ellos se retiraron del Circuito Colonias con calle 20 de Chuburná, donde está instalado el Circo Atayde.
América Méndez Avila dijo que alguien convocó en las redes sociales para el plantón y no había un líder del movimiento. "Participo en esta protesta porque no me gusta cómo tratan a los animalitos. Están amarrados de tal forma que no se pueden ni mover", expresó.
Carlos Alberto Rodríguez Calderón afirmó que el Cirque du Soleil, al que calificó como el mejor circo del mundo, no utiliza animales, sino bailarinas, magos, payasos, acróbatas y actores para su espectáculo. Lo mismo pueden hacer los mexicanos.
"Un espectador me quiso pegar, me llamó mariguano, pero fue una provocación, no le hice caso", añadió el joven.
La protesta empezó a las 5 de la tarde y terminó dos horas después.- Joaquín Chan Caamal
El preparatoriano Carlos Rodríguez Calderón dijo que no quieren que se acabe el circo:
Elefante y camello
Rodríguez Calderón indicó que el elefante del Atayde está encadenado y apenas puede mover su pata, y que los camellos no pueden ni moverse por falta de espacio.
Dolor
El joven señaló que los animales también sienten dolor y sufren igual como los seres humanos y "se percibe en sus rostros como huellas de lágrimas".
Vigilancia
Personal del circo Atayde cuidó el acceso principal y las taquillas.