Noticias de Yucatán
(caos vial, visita presidencial, cumbre, internacional)
La presencia de los presidentesde varios países de Centro y Suramérica, el de México incluído, con motivo de la XIII Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla, generó nuevamente un colosal caos vial por el cierre de calles en la zona hotelera y en los alrededores del Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI.
(caos vial, visita presidencial, cumbre, internacional)
Publicada: 6 diciembre 2011
Agentes de la Secretaría de Seguridad Pública intentan regular el tránsito en la 60 con Av. Colón (1)
Caos vial por la Cumbre
La operación de seguridad obliga al cierre de calles
Publicada: 6 diciembre 2011
La operación de seguridad obliga al cierre de calles
Publicada: 6 diciembre 2011
A la izquierda, dos soldados durante la vigilancia en los alrededores del Centro de Convenciones Yucatán Siglos XXI. Abajo, el caos vial frente al CUM de la 60 Norte, por el cierre de calles
Un colosal cuello de botella ocasionó la operación de seguridad que se montó en la zona hotelera con motivo de la llegada de varios presidentes de Centro y Suramérica a la II Cumbre de la Alianza del Pacífico y la XIII Cumbre del Mecanismo de Diálogo y Concertación de Tuxtla.
A las 9:30 de la mañana el Estado Mayor Presidencial ordenó el cierre total de la calle 60 con 35 y de la avenida Colón con 62 para la salida del convoy presidencial que partió rumbo al Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI, sede de la Cumbre de Presidentes.
La fila de vehículos oficiales se extendió a lo largo de varias cuadras.
Lo mismo ocurrió en las cercanías del centro de Convenciones, donde también se cerraron varias calles.
Los vehículos de transporte público fueron los más afectados, debido a que los que transitaban sobre la calle 60 rumbo al Norte, fueron desviados a la avenida Reforma, donde doblarían para seguir al Norte.
En tanto los que transitaban sobre la avenida Colón tuvieron que esperar a que se abriera el tránsito.
La operación controlada por el Ejército, la Policía Federal y el Estado Mayor Presidencial comenzó desde anteayer.
Se revisaron de manera exhaustiva los vehículos que entraban a los hoteles Fiesta Americana y Hyatt, para evitar el traslado de objetos peligrosos.
El Ejército desplegó francotiradores en los techos de los hoteles, los agentes eran capaces, según sus superiores, de darle al blanco a 300 metros de distancia.
No se permitía el acceso a la zona de hoteles. "Camine, camine, no pude estar aquí", eran las indicaciones de los guardias.
La seguridad se reforzó debido al combate frontal de la delincuencia organizada, se indicó.
Según una persona del Estado Mayor Presidencial, se ha recibido varias amenazas de la delincuencia por la captura de importantes capos de la delincuencia organizada.
El lugar estaba cerrado con vayas y nada más se permitía el acceso del personal de seguridad y los vehículos que transportaban al personal a la Cumbre.
Se indicó que la operación se extendió un kilómetro a la redonda, e incluyó intervenir las radiocomunicaciones.
La operación terminó luego de que el presidente Calderón salió del hotel rumbo al Centro de Convenciones, donde ya había una operación simila
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A las 9:30 de la mañana el Estado Mayor Presidencial ordenó el cierre total de la calle 60 con 35 y de la avenida Colón con 62 para la salida del convoy presidencial que partió rumbo al Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI, sede de la Cumbre de Presidentes.
La fila de vehículos oficiales se extendió a lo largo de varias cuadras.
Lo mismo ocurrió en las cercanías del centro de Convenciones, donde también se cerraron varias calles.
Los vehículos de transporte público fueron los más afectados, debido a que los que transitaban sobre la calle 60 rumbo al Norte, fueron desviados a la avenida Reforma, donde doblarían para seguir al Norte.
En tanto los que transitaban sobre la avenida Colón tuvieron que esperar a que se abriera el tránsito.
La operación controlada por el Ejército, la Policía Federal y el Estado Mayor Presidencial comenzó desde anteayer.
Se revisaron de manera exhaustiva los vehículos que entraban a los hoteles Fiesta Americana y Hyatt, para evitar el traslado de objetos peligrosos.
El Ejército desplegó francotiradores en los techos de los hoteles, los agentes eran capaces, según sus superiores, de darle al blanco a 300 metros de distancia.
No se permitía el acceso a la zona de hoteles. "Camine, camine, no pude estar aquí", eran las indicaciones de los guardias.
La seguridad se reforzó debido al combate frontal de la delincuencia organizada, se indicó.
Según una persona del Estado Mayor Presidencial, se ha recibido varias amenazas de la delincuencia por la captura de importantes capos de la delincuencia organizada.
El lugar estaba cerrado con vayas y nada más se permitía el acceso del personal de seguridad y los vehículos que transportaban al personal a la Cumbre.
Se indicó que la operación se extendió un kilómetro a la redonda, e incluyó intervenir las radiocomunicaciones.
La operación terminó luego de que el presidente Calderón salió del hotel rumbo al Centro de Convenciones, donde ya había una operación simila
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