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El Carnaval es una festividad tradicional y popular. Por tanto, cualquier decisión que adopte la autoridad municipal sobre su organización y realización debe tomar en cuenta a la ciudadanía en general, no sólo a unos cuantos sectores, afirma Ernesto Jesús Mena Acevedo, secretario general del Comité Ejecutivo Estatal del PRD.
“Puede ser que algunos comercios ubicados en Paseo de Montejo se vean afectados durante los días del Carnaval, y otros tal vez hasta se beneficien, pero debe considerarse que se trata de una festividad popular y temporal”, añade.
Mena Acevedo subraya que se deben evaluar bien los beneficios y los perjuicios de cambiar la sede de las carnestolendas, sobre todo al trasladarlo a un lugar “muy lejano y poco seguro como es Xmatkuil”.
“Espero que detrás de la intención de llevar el Carnaval a Xmatkuil no haya un propósito de ‘gandallismo’ de ciertos empresarios y que el presidente municipal no se preste a ello, porque se sabe que los locales de la feria ya tienen posesionarios y tal pareciera que el objetivo es que al efectuarse los festejos en el recinto ferial esos empresarios serían los ‘ganones’ y se haría a un lado a ciudadanos que instalan sus puestos en el derrotero del Carnaval”, dice.
El PRD: Hay que tomar en cuenta el sentir ciudadano
En opinión del dirigente, la postura de las cámaras empresariales es respetable, pero no debe ser determinante.
El directivo recomienda explorar otras opciones, como llevar los espectáculos “grandes” a parques de los suburbios (Santiago, San Sebastián, Mejorada) y dejar en Montejo a los grupos y artistas locales, así como expandir los puestos y las gradas hasta el primer semáforo de la Prolongación de Montejo, para que el desfile empiece en ese punto y de esa manera se disperse la concentración de la gente en sólo ocho esquinas del Paseo de Montejo.”Reitero, lo importante es que se escuche la opinión de la ciudadanía y se le tome en cuenta en la definición de lo que se hará con el Carnaval”.
