Las autoridades determinaron que fue un homicidio y que este sujeto fue arrojado ahí doce horas después de ser privado de la vida.
El cuerpo del individuo fue reclamado por su padre, Juan Daniel Martínez Santana, quien lo identificó plenamente, pero no denunció el crimen.
Sin embargo, dicho delito se persigue de oficio y se abrió la carpeta de investigación 157/1ª./2016.
La autopsia practicada al cuerpo de Jorge Martínez dio como resultado que la causa de la muerte fue asfixia por sofocación.
En la necropsia no se tuvo resultados de ingesta de alcohol y drogas.
El cuerpo presentaba un golpe sangrante en el rostro y excoriaciones en el torso de ambos brazos, así como raspones en los nudillos, por lo que no se descarta que haya opuesto resistencia antes de morir asfixiado.
La Fiscalía General del Estado no descarta ninguna línea de investigación para aclarar el que ya es considerado el cuarto homicidio doloso en lo que va de febrero en Yucatán.
Fue ultimado por medio de la asfixia por sofocación (se presume que fue atado de las manos y le pusieron una bolsa alrededor en la cabeza) para interrogarlo y no resistió el castigo y murió.
El o los homicidas esperaron a que pasaran las horas y disminuyera el tránsito en el Periférico para tirar el cuerpo a la orilla del kilómetro 20+500, buscando despistar a las autoridades, simulando que fue atropellado.
