La pesquería del mero arranca su periodo de captura con baja producción, reportando entradas de barcos en su primer viaje con menos de una tonelada en promedio, dio a conocer el presidente de la Sociedad Producto Mero y de la Asociación de Armadores de Progreso, Manuel Sánchez.
La baja producción genera pérdidas de 40 mil pesos por viaje a los armadores del puerto, quienes en el mercado internacional disfrutan de excelentes precios que van de los 130 a los 140 pesos, por cada kilo de mero grande, producto que escasea de sobremanera en la región, generando dificultades para todo el sector.
Manuel Sánchez dijo que por la pérdida que se está generando con la llegada de barcos que apenas traen de 300 kg de mero a 1.2 toneladas en viajes de 18 días, muchos empresarios se han visto en la necesidad de poner a descansar a sus embarcaciones, lo que impacta directamente a los pescadores, quienes ven reducidas sus opciones de trabajo al cesar la salida a los navíos.
Las afectaciones se hacen evidentes inclusive entre los pescadores ribereños, que se hacen a la mar todos los días y cuyas capturas rondan entre los cinco y los 20 kg por día, lo cual genera pérdidas en el mismo sector, donde muchos dueños de lancha ya no cuentan con recursos para buscar el producto.
Manuel Sánchez dijo que han sido muchos factores que han impactado la biomasa, razón que ha llevado a los pescadores a desconfiar de todas las actividades industriales y de investigación en el mar.