Noticias de Yucatán
Un documental publicado en Pear Video y un artículo en el South China Morning Post sacaron a la luz una noticia que conmocionó a China y al mundo entero. A raíz de esta información, las autoridades de Chengdu, provincia de Sichuan, comenzaron a investigar al Enbo MMA Club.
Un documental publicado en Pear Video y un artículo en el South China Morning Post sacaron a la luz una noticia que conmocionó a China y al mundo entero. A raíz de esta información, las autoridades de Chengdu, provincia de Sichuan, comenzaron a investigar al Enbo MMA Club.
“Algunos de estos niños eran huérfanos, y otros tenían una familia que era demasiado pobre para educarlos”, esa es una de las frases que utilizó Enbo, ex oficial de la policía tibetana y fundador del Enbo MMA Club en 2001, para empezar a describir su “bondadoso” accionar que está bajo la mira de las autoridades.
Las imágenes muestran a muchachos -los más jóvenes de apenas 12 años- peleándose dentro de las jaulas de combate, delante de una multitud que grita por barbarie y sangre. Estos niños y adolescentes fueron “rescatados” de las calles de las zonas más pobres de China y adoptados para recibir brutales entrenamientos.
El fundador del club aseguró que el Buró de Asuntos Civiles de China es quien autorizó las más de 400 adopciones. “Ellos están de acuerdo, ellos lo sellaron y los mandan aquí”, aseguró ante la prensa.
Dong Zhou, instructor de estos jóvenes entusiastas, afirmó que esta oportunidad es la mejor que pueden tener. “Algunas personas me dijeron: ‘Me doy por vencido, quiero irme’. Pero yo les pregunto ¿qué pueden hacer en sus casas? ¿Pastorear ganado? ¿Ser un mendigo? ¿O ser un gángster?”, esbozó.
Uno de los jóvenes, de 14 años de edad, Xiao Wu, dijo en el documental que su vida en el club es mejor que la que tenía antes, que allí encontró un lugar estable en donde vivir. “Hay todo aquí: comida, ropa y un lugar para dormir”, sostuvo.
“La comida aquí es mucho mejor que en casa. Hay carne y huevos, pero en mi casa sólo puedo comer papas. Si vuelvo a casa tendré que conseguir un trabajo”, reconoció el niño que sueña con seguir los pasos de Conor McGregor y luchar en el Ultimate Fighting Championships.
Según el South China Morning Post, un funcionario de Liangshan les confirmó que los menores de edad se irán del club y se les proporcionará una educación. “El Enbo MMA Club incitó y utilizó niños menores de edad para la lucha comercial y obtuvo un enorme beneficio”, sostuvo el informe del rotativo chino.
La sociedad china quedó dividida tras la difusión de esta información. Una parte acusa a Endo y los integrantes de este lugar de aprovecharse de los jóvenes y lucrar a costa de sus necesidades y sueños por un futuro mejor; mientras que la otra cree que estos adolescentes no tienen una mejor opción que la de tomar ese camino.