Noticias de Yucatán
A Miriam le diagnosticaron hepatitis C hace 20 años, pero
después de los primeros síntomas los médicos tardaron 6 años en descubrir su
padecimiento.
Miriam Castellot, paciente que se recuperó de hepatitis
C, relató que era una persona muy sana pero empezó a padecer dolores de cabeza
muy intensos, dolores musculares, hemorragia por nariz. Tras tener su primer
hijo quedó anémica y tenía que ser sometida a transfusiones; su contagio es
incierto porque es cirujano dentista y le tocó trabajar en los años 70, momento
en que se trabajaba sin guantes.
El medicamento no hizo lo correcto en su organismo y
tardó entonces 10 años más en responder al tratamiento.
Hoy ya no tiene hepatitis, pero tantos años de padecimiento
le dejaron cirrosis.
Miriam Castellot agregó que la hepatitis es una
enfermedad que no presenta síntomas, hasta 20 años, 25 años después, pero
cuando no hay síntomas quiere decir que el hígado todavía no está dañado.
A nivel mundial 325 millones de personas viven con
hepatitis virales.
En 2015 estos virus causaron un millón y medio de
muertes; lo que se compara con los fallecimientos anuales originados por el
sida, el paludismo y la tuberculosis.
Se estima que también a nivel mundial, durante 2015, ocurrieron
1.75 millones de nuevas infecciones por virus de hepatitis C.
En México la incidencia de estima en 19 mil 300 nuevos
casos por año y que, de no tomar acciones pertinentes, para 2021 será de 45 mil
pacientes.
A eso se añade que el 80 por ciento de los pacientes
desconoce que está enfermo.
Y las muertes por hepatitis virales van en aumento.
Entre los factores de riesgo destacan haber recibido
transfusiones de sangre antes de 1995; consumir drogas vía intravenosa o
intranasal; realizarse tatuajes, piercings, manicura o pedicura con material
mal esterilizado; compartir utensilios de higiene personal infectados con el
virus; y los pacientes con hemodiálisis.