Noticias de Yucatán
A un año de la modificación que se le realizó a la Ley de Hacienda, hasta el momento solamente 101 casas de
empeño se han registrado ante la Agencia de Administración Fiscal de Yucatán (AAFY), de unas 300 que se estiman operan en el
Estado.
De igual manera la reforma establece que ahora este tipo de negocios tienen que pagar un tipo de impuestos por dos razones:
cuando se pierde la prenda y también desde su registro.
Como informamos, con el regreso a clases las casas de empeño esperan una oleada de pignorantes yucatecos para enfrentar los
gastos en útiles y material escolar, ya que en la entidad hay unos 100 mil padres de familia sin acceso a los créditos en el sistema
financiero.
Carlos Pasos Novelo, director general de la AAFY, informó que todas las casas de empeño tienen la obligación de registrarse para
operar, además de pagar un impuesto de un cinco por ciento sobre la diferencia entre el valor del bien que toman las casas de
empeño y el valor en que la vendan, en caso de que no se rescate la pieza.
Lo anterior, dijo, obligará a las casas de empeño a documentar bien por bien, a tener un registro respecto de la cantidad en la que
tomó la pieza y del monto en que la vendió.
El monto que ha cobrado la dependencia estatal por este impuesto, de enero a mayo pasado, ha sido por 142 mil 62 pesos. El
reporte de este impuesto es mensual para cada casa de empeño registrada.
Y aunque no precisó cuántas se han inscrito este 2017 se ha contabilizado 67 mil 100 pesos por pagar el derecho de
funcionamiento. El monto a pagar se basa en diversas características del negocio, como si cuenta con sucursales, el capital con el
cuenta, entre otras, por lo que la cifra del gravamen no es el misma para todos.
“Nosotros solo recibimos solicitudes de estos establecimientos para su registro, para que puedan operar. Los que no cuentan con el
permiso están expuestos a la revisión y sanción de la Procuraduría Federal del Consumidor entre otras autoridades”, concluyó. Sipse