Noticias de Yucatán
(SinEmbargo).- Tres semanas después, Guadalupe Pamela Gallardo Volante no ha regresado a su casa en la Ciudad de México. Lo haría al atardecer del 5 de noviembre, luego de asistir a un festival de música electrónica en la Delegación Tlalpan, pero las horas y los días pasaron y su familia, con escasa ayuda de las autoridades capitalinas, aún busca indicios sobre su paradero.
(SinEmbargo).- Tres semanas después, Guadalupe Pamela Gallardo Volante no ha regresado a su casa en la Ciudad de México. Lo haría al atardecer del 5 de noviembre, luego de asistir a un festival de música electrónica en la Delegación Tlalpan, pero las horas y los días pasaron y su familia, con escasa ayuda de las autoridades capitalinas, aún busca indicios sobre su paradero.
Gallardo Volante, de 23 años, es una mujer trabajadora.
Labora como mesera en un restaurante cerca de su casa. Indecisa, sí, pues nunca
terminó por seleccionar la carrera en la que quería desenvolverse, pero muy
noble. “Pambolera” y amante del ritmo. Simplemente desapareció.
“Pamela es una hija de familia. Pamela es una hija
honrada. Es una hija que no se puede desprender de la familia. Nos ama
demasiado. Salió con su novio y no regresó”, lamentó María del Carmen, la madre
de la joven.
Guadalupe apartó el sábado 4 de noviembre para asistir al
SOUL TECH, organizado por XDCMusic en el kilómetro 13.5 de la autopista
Ajusco-Picacho. Pidió permiso y lo obtuvo. Regresaría hasta el día siguiente,
el domingo 5.
En la Sport Área, en la colonia San Miguel Ajusco, bandas
de los géneros Deep, House, Minimal y Techno dieron la bienvenida a la joven, a
su novio, Jesús Zamora, y a dos amigos más, Enrique y Julieta. (Sin Embargo).