Noticias de Yucatán
Al menos cuatro perros murieron envenenados en el fraccionamiento Real del Bosque, al parecer por uno de sus habitantes.
Vecinos temen que una acción similar se repita y llegue a afectar incluso a algún niño, por lo que pidieron que se investigue quién fue el responsable de acabar con las mascotas.
La fotografía de Kiara, una perra de raza pastor alemán, circuló en redes sociales y junto con ella la denuncia de una serie de envenenamientos de perros en Real del Bosque.
Adriana Romero era la propietaria de Kiara, que era muy conocida entre los vecinos del fraccionamiento pues era común verle resguardando la papelería que atiende Adriana. “Nunca le hizo daño a nadie de los vecinos, hasta los niños pasaban y la acariciaban”, narró.
La mañana del domingo casi dos kilos de trozos de chorizo con veneno para ratas fueron esparcidos en el parque de la colonia, situada al norte de la ciudad; el lunes Kiara comió de esa carne y se envenenó.
“Yo salgo a correr con mi perra todos los días y el día lunes que salimos a las 7 de la mañana a correr veo cómo corre hacia el parque, veo cómo está olfateando por ahí, entonces me acerqué corriendo y cuando me ve la perra agarra el pedazo de chorizo, se echa a correr y cuando quise alcanzarlo a la cuadra siguiente ya venía convulsionando”, dijo Fernando Bernal, esposo de Adriana.
La pareja intentó salvar a su perrita, la llevó al veterinario pero fue en vano y murió; el diagnóstico confirmó que se trataba de envenenamiento.
“Nosotros creemos que lo pusieron el día sabado en la madrugada, el chorizo estuvo ahí todo el domingo, el día lunes que ocurrió lo de mi perra, cuando regresé a buscar qué era lo que había comido mi hijo y yo encontramos varias palomas muertas y pajaritos también, mi hija también encontró una perrita callejera ya muerta”, comentó Fernando.
Preparan denuncia penal
Además de la mascota de la familia Bernal Romero al menos otros tres perritos murieron envenenados.
El acto preocupó a varios de los habitantes, pues algunos de los trozos de carne estaban cerca del área de juegos infantiles.
“No faltará que algún niño por la travesura o curiosidad (la coma), o que algún pepenador de los que pasan, por la necesidad, en una de esas se lo llevan a la boca y termine en una tragedia”, consideró Fernando.
Habitantes de la zona opinaron que los hechos derivaron de las pretensiones de algunos de ellos para mantener al lugar sin mascotas, ahora esperan que con la cooperación de todos pronto puedan acceder a las grabaciones de cámaras de seguridad que hay en algunas casas para fortalecer la demanda penal que preparan, pues desde 2013 el Código Penal del Estado contempla los delitos contra la vida y la integridad de los animales.
“Había (chorizo envenenado) por todas partes, casi que dejaron un pedacito en cada árbol, donde más encontramos fue por el área de las jardineras... el problema es que también había en el área de juegos.
“Imagínese el peligro de que un niño hubiera agarrado un pedazo, tenían muchisimo veneno y además no sé que mente tan maqueavélica hizo esto que hasta se dieron el tiempo de cocer el chorizo, no se vale que hagan esto, no solo ponen en riesgo la vida de las mascotas, sino también la de los niños.” comentó una vecina.
Al menos cuatro perros murieron envenenados en el fraccionamiento Real del Bosque, al parecer por uno de sus habitantes.
Vecinos temen que una acción similar se repita y llegue a afectar incluso a algún niño, por lo que pidieron que se investigue quién fue el responsable de acabar con las mascotas.
La fotografía de Kiara, una perra de raza pastor alemán, circuló en redes sociales y junto con ella la denuncia de una serie de envenenamientos de perros en Real del Bosque.
Adriana Romero era la propietaria de Kiara, que era muy conocida entre los vecinos del fraccionamiento pues era común verle resguardando la papelería que atiende Adriana. “Nunca le hizo daño a nadie de los vecinos, hasta los niños pasaban y la acariciaban”, narró.
La mañana del domingo casi dos kilos de trozos de chorizo con veneno para ratas fueron esparcidos en el parque de la colonia, situada al norte de la ciudad; el lunes Kiara comió de esa carne y se envenenó.
“Yo salgo a correr con mi perra todos los días y el día lunes que salimos a las 7 de la mañana a correr veo cómo corre hacia el parque, veo cómo está olfateando por ahí, entonces me acerqué corriendo y cuando me ve la perra agarra el pedazo de chorizo, se echa a correr y cuando quise alcanzarlo a la cuadra siguiente ya venía convulsionando”, dijo Fernando Bernal, esposo de Adriana.
La pareja intentó salvar a su perrita, la llevó al veterinario pero fue en vano y murió; el diagnóstico confirmó que se trataba de envenenamiento.
“Nosotros creemos que lo pusieron el día sabado en la madrugada, el chorizo estuvo ahí todo el domingo, el día lunes que ocurrió lo de mi perra, cuando regresé a buscar qué era lo que había comido mi hijo y yo encontramos varias palomas muertas y pajaritos también, mi hija también encontró una perrita callejera ya muerta”, comentó Fernando.
Preparan denuncia penal
Además de la mascota de la familia Bernal Romero al menos otros tres perritos murieron envenenados.
El acto preocupó a varios de los habitantes, pues algunos de los trozos de carne estaban cerca del área de juegos infantiles.
“No faltará que algún niño por la travesura o curiosidad (la coma), o que algún pepenador de los que pasan, por la necesidad, en una de esas se lo llevan a la boca y termine en una tragedia”, consideró Fernando.
Habitantes de la zona opinaron que los hechos derivaron de las pretensiones de algunos de ellos para mantener al lugar sin mascotas, ahora esperan que con la cooperación de todos pronto puedan acceder a las grabaciones de cámaras de seguridad que hay en algunas casas para fortalecer la demanda penal que preparan, pues desde 2013 el Código Penal del Estado contempla los delitos contra la vida y la integridad de los animales.
“Había (chorizo envenenado) por todas partes, casi que dejaron un pedacito en cada árbol, donde más encontramos fue por el área de las jardineras... el problema es que también había en el área de juegos.
“Imagínese el peligro de que un niño hubiera agarrado un pedazo, tenían muchisimo veneno y además no sé que mente tan maqueavélica hizo esto que hasta se dieron el tiempo de cocer el chorizo, no se vale que hagan esto, no solo ponen en riesgo la vida de las mascotas, sino también la de los niños.” comentó una vecina.