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El Frente Único de Trabajadores del Volante (FUTV) insistirá en el aumento de la tarifa social porque en su mayoría los usuarios son estudiantes y personas de la tercera edad, quienes gozan de ese beneficio que otorgan los concesionarios del transporte público de Mérida.
La tarifa social es de $3 desde hace más de 12 años y la de adultos es de $8, que alcanzó en enero de 2017.
Héctor Fernández Zapata, secretario general del sindicato de taxistas, explicó las razones por las que urge un aumento en las tarifas: las camionetas de transporte colectivo tienen capacidad para 15 pasajeros, de los cuales ocho ó 10 tienen credencial de tarifa social de la Dirección de Transporte.
Por ello, manifestó, el viaje no es rentable para sus socios de las rutas urbanas porque cubren largas distancias por un bajo costo.
Se entrevistó a “Billy” Fernández por el anuncio que hizo el 17 de enero pasado sobre una petición de alza del pasaje y la negativa que dio el director de Transporte, Humberto Hevia Jiménez.
El dirigente sindical precisó que el FUTV no realiza un nuevo estudio para sustentar la solicitud de aumento de las tarifas, sino que es el mismo que realizaron los camioneros y el cual sugiere la actualización del precio de los pasajes. Aunque dijo que los concesionarios cumplen al hacer la solicitud ante la carestía de las gasolinas, pero la autoridad decide si lo otorga o no.
El secretario admitió que a nadie le gusta que aumente el costo de los servicios porque indudablemente afecta los bolsillos de las familias, algunas de las cuales tienen cuatro hijos en la escuela y los estudiantes usan hasta cuatro veces las “combis”.
Pero, señaló, también deben entender que el alza de precio en los combustibles afecta no sólo a los taxistas, sino a todo aquel que posee un vehículo.— J. Ch. C.
Para contrarrestar el elevado gasto en la operación del taxi, dijo, cubren más horarios en las rutas de la ciudad a fin de captar mayor número de pasajeros.
“A nosotros lo que nos afecta bastante es la tarifa subsidiada porque hace muchos años que tiene el mismo precio y hay mucha gente que tiene credencial aunque no sea estudiante”, señaló. “El chofer ve que la persona no puede ser estudiante, pero acepta la tarjeta para no tener problemas, pero eso afecta nuestros ingresos”.
“El alza de los combustibles lo resienten los compañeros porque cuando vas a cargar gasolina pagas más, y los ingresos son menores porque en las camionetas viajan pasajeros con tarifa social en su mayoría”, dijo. “Y ni siquiera tenemos la esperanza de que llevemos a pasajeros de tarifa completa porque nuestros clientes prácticamente son fijos”.
Tarifas Transporte
“Billy” Fernández dijo que será respetuoso de la decisión de las autoridades del transporte.
Junta con el gobierno
Según indicó, ya le avisaron de una reunión de concesionarios con funcionarios del Estado, pero aún no se fija fecha ni hora.
Petición reiterada
A su decir, los concesionarios del transporte de Mérida absorben la tarifa social porque la diferencia del costo del pasaje de adulto no ingresa a la empresa. Pero en la próxima reunión que convoquen, él insistirá en que suban el precio a la tarifa social.
