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Con un proyecto en puerta de la empresa Cemex para procesar la basura de Umán, Erick Pech Canché, director de Imagen y Servicios Públicos del Ayuntamiento, espera que en cuatro meses los residuos sólidos se traten como corresponde
La situación del basurero municipal de Umán es alarmante. Cinco hectáreas de tiradero de basura ardieron durante semanas sin control y, ante esta situación, intervinieron Bomberos y Protección Civil para erradicar el incendio, en un 50% al día de hoy bajo control, explica Erick Iván Pech Canché, director de Imagen y Servicios Públicos del Ayuntamiento de Umán.
Si a esto le sumamos una contaminación “muy grave”, dicho por el mismo funcionario, que produce el basurero en el medio ambiente y sus habitantes, la situación se torna aún más alarmante y peligrosa.
Yucatán Ahora recibió en semanas pasadas reclamos de vecinos que, hartos del olor nauseabundo que emana del tiradero de basura y del humo constante que enferma gente, fuimos a investigar qué pasaba.
Pech Canché nos recibió hoy para dar la versión oficial de los hechos y, además de dar las últimas novedades del control del incendio, explica que desde hace cuatro meses están en tratos con Cemex para que colabore con el Ayuntamiento para hacer un correcto tratamiento de la basura.
A continuación les dejamos una entrevista con el funcionario:
¿En qué situación está ahora el basurero municipal de Umán, luego de las quejas de los vecinos por las constantes quemas que se realizaron durante semanas?
Se incendiaron cinco hectáreas y estuvo ardiendo más de dos semanas. Actualmente controlamos más del 50% gracias al apoyo de bomberos estatales y personal de Defensa Civil, además de otros trabajadores del lugar. Trabajan entre 50 y 60 personas entre 14 y 15 horas diarias para controlar el incendio.
¿Y la basura tirada a la aguada para apagarla?
No son residuos del basurero municipal, sino de la empresa Nova, que maneja celulosa. Ya se los exhortó desde el Ayuntamiento a que informen por qué tiran la basura en la aguada y Seduma ya está en el tema también.
¿Por qué se llegó a esta situación?
El problema del basurero ha sido de hace tiempo y cada año se realizaba esta quema, sin embargo esta vez se nos salió de las manos y ocurrió este incidente. Ha sido un problema que no se ha atendido hasta ahora. Seduma traía un proyecto integral bien completito para tratar la basura pero, por falta de recursos, nunca se llevó al cabo.
En Umán viven más de 50 mil personas y un relleno sanitario urge con todo el proceso para tratar la basura…
Un relleno sanitarionecesita 300 toneladas diarias de basura para todo el proceso. Si son menos, el costo de la operación para hacer todo el tratamiento es muy alto. En Umán generamos 45 toneladas diarias y tendríamos un costo aproximado de $800 para el tratamiento por toneladas y eso es muy caro. Sólo con la colaboración del gobierno podríamos hacerlo.
Si hoy por hoy no existe esa colaboración ¿Qué van a hacer?
Desde hace cuatro meses se firmó un convenio con Cemex, una empresa con compromiso con el medio ambiente y socialmente responsable, que pretende darle aprovechamiento a la basura que se genera en Umán para sacar combustible. Es un proyecto integral en el que estamos trabajando.
¿Cómo sería el proceso?
Cemex instala en el basurero municipal una máquina que tritura la basura y saca el aprovechable, que sirve como combustible. Ellos ya habían trabajado con el Ayuntamiento en años anteriores pero no sé por qué motivo dejaron de hacerlo. Ahora retomamos el diálogo y ya firmamos convenio.
¿Cuál es el grado de contaminación por el basurero y en cuánto tiempo se pondría en marcha este proyecto?
El grado de contaminación es muy grave. No tenemos los datos exactos ahora pero afecta a la fauna, el medio ambiente, el manto freático y también a la población, por las partículas que se desprenden del monóxido de carbono. Por falta de recursos no se hizo algo antes pero esperamos que el proyecto de Cemex para tratar la basura se ponga en marcha en cuatro meses, aproximadamente.
Los vecinos se quejan también del olor de la huesera ¿Cómo ha intervenido el municipio al respecto?
La empresa “Grasas Peninsulares” es una planta de rendimiento que procesa víceras y restos de fábricas como Bachoco y Kekén, entre otras. Allí hierven los desperdicios y se genera una harina para alimentos y productos de la empresa. Cuando esta máquina sobrepasaba sus capacidades, sus biodigestores no daban abasto y salía ese olor desagradabe. El alcalde Ruz Guzmán clausuró Grasas Peninsulares por este motivo pero ya funciona de nuevo, aunque por tiempos más acotados para que los biodigestores no se saturen. Yucatán Ahora