Noticias de Yucatán
La moda de los piercings también tiene sus riesgos. Un estudio revela que perforarse el cuerpo puede causar complicaciones más allá de las infecciones y sangrados locales.
La moda de los piercings también tiene sus riesgos. Un estudio revela que perforarse el cuerpo puede causar complicaciones más allá de las infecciones y sangrados locales.
El estudio, publicado recientemente en American Journal of Clinical Dermatology, revela que en el 20% de los casos se producen problemas, algunos de considerable gravedad.
"Lo deseable sería que los interesados se informasen más sobre las repercusiones" que esta práctica tiene sobre su salud, señaló Anne Laumann, profesora de Dermatología y principal autora de la investigación.
Gracias al estudio, Laumann y su equipo no solo reafirmaron que los piercings pueden causar complicaciones como infecciones y sangrados locales, sino que además pueden derivar en otras menos comunes que suponen un mayor riesgo para la salud como por ejemplo la hepatitis, hemorragias o daños en los nervios.
No a los adornos en la boca, el ombligo e incluso la oreja
Según la publicación, los piercings en la boca pueden producir, entre otras enfermedades, lesiones bucodentales, inflamación, dificultades para hablar y masticar, sangrado o reacciones alérgicas.
Además, como señala David Herrera, vicepresidente de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA), en El Mundo Digital, el riesgo es mayor cuando se trata de la lengua, ya que además de provocar fisuras o abrasiones, puede acarrear la más preocupante de todas complicaciones: la ‘depapilación’ o pérdida del triángulo de la encía que hay entre diente y diente.
Incluso perforaciones tan comunes como las de la parte superior de la oreja, en el borde del cartílago, son poco recomendables de acuerdo con la profesora. Éstas, al igual que las del ombligo, que además tardan un año en curarse, cuentan con posibilidades de infección altas.
Los responsables de la investigación hacen un llamamiento a la prevención e información. Advierten que los problemas pueden aparecer dependiendo de los materiales que se usen, del procedimiento, los profesionales, la higiene, los cuidados posteriores y las zonas del cuerpo.
La moda de los piercings también tiene sus riesgos. Un estudio revela que perforarse el cuerpo puede causar complicaciones más allá de las infecciones y sangrados locales.
La moda de los piercings también tiene sus riesgos. Un estudio revela que perforarse el cuerpo puede causar complicaciones más allá de las infecciones y sangrados locales.
El estudio, publicado recientemente en American Journal of Clinical Dermatology, revela que en el 20% de los casos se producen problemas, algunos de considerable gravedad.
"Lo deseable sería que los interesados se informasen más sobre las repercusiones" que esta práctica tiene sobre su salud, señaló Anne Laumann, profesora de Dermatología y principal autora de la investigación.
Gracias al estudio, Laumann y su equipo no solo reafirmaron que los piercings pueden causar complicaciones como infecciones y sangrados locales, sino que además pueden derivar en otras menos comunes que suponen un mayor riesgo para la salud como por ejemplo la hepatitis, hemorragias o daños en los nervios.
No a los adornos en la boca, el ombligo e incluso la oreja
Según la publicación, los piercings en la boca pueden producir, entre otras enfermedades, lesiones bucodentales, inflamación, dificultades para hablar y masticar, sangrado o reacciones alérgicas.
Además, como señala David Herrera, vicepresidente de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA), en El Mundo Digital, el riesgo es mayor cuando se trata de la lengua, ya que además de provocar fisuras o abrasiones, puede acarrear la más preocupante de todas complicaciones: la ‘depapilación’ o pérdida del triángulo de la encía que hay entre diente y diente.
Incluso perforaciones tan comunes como las de la parte superior de la oreja, en el borde del cartílago, son poco recomendables de acuerdo con la profesora. Éstas, al igual que las del ombligo, que además tardan un año en curarse, cuentan con posibilidades de infección altas.
Los responsables de la investigación hacen un llamamiento a la prevención e información. Advierten que los problemas pueden aparecer dependiendo de los materiales que se usen, del procedimiento, los profesionales, la higiene, los cuidados posteriores y las zonas del cuerpo.