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Las lluvias y el creciente río Guanajuato provocaron que se abrieran tres socavones en el antiguo camino a Marfil; dos de ellos mayores de 5 y 7 metros de diámetro por 3 de hondo y uno más de un metro. El camino está incomunicado al paso vehicular y peatonal.
Durante la tarde del martes y madrugada de hoy, las abundantes lluvias ocasionaron que el río Guanajuato aumentara considerablemente su caudal, en algunos puntos a más de 2 metros de alto y 20 de ancho, llevándose todo a su paso, principalmente basura y árboles.
La creciente del río, al pasar por un costado del antiguo camino a Marfil, a la altura de la Hacienda de Silva, antes de llegar al Nepomuceno, el agua penetró en el muro de contención y deslavó el camino, provocado que se abrieran dos socavones. Uno de 5 metros de diámetro por 3 de hondo y el segundo de 7 metros por 3 de profundo.
Un tercer hoyo se abrió en el mismo camino, pero a 200 metros antes, y aunque no es mayor de 1 metro, por dentro se hizo una cueva, misma que está a punto del colapso.
Personal de Protección Civil acudió al lugar para supervisar la zona y acordonó los dos puntos de riesgo, prohibiendo el paso vehicular y peatonal.
También una cuadrilla de trabajadores de la Dirección de Obra Pública Municipal, así como ingenieros civiles acudieron al lugar para evaluar los tres socavones y realizar los trabajos correspondientes. (AM).
Las lluvias y el creciente río Guanajuato provocaron que se abrieran tres socavones en el antiguo camino a Marfil; dos de ellos mayores de 5 y 7 metros de diámetro por 3 de hondo y uno más de un metro. El camino está incomunicado al paso vehicular y peatonal.
Durante la tarde del martes y madrugada de hoy, las abundantes lluvias ocasionaron que el río Guanajuato aumentara considerablemente su caudal, en algunos puntos a más de 2 metros de alto y 20 de ancho, llevándose todo a su paso, principalmente basura y árboles.
La creciente del río, al pasar por un costado del antiguo camino a Marfil, a la altura de la Hacienda de Silva, antes de llegar al Nepomuceno, el agua penetró en el muro de contención y deslavó el camino, provocado que se abrieran dos socavones. Uno de 5 metros de diámetro por 3 de hondo y el segundo de 7 metros por 3 de profundo.
Un tercer hoyo se abrió en el mismo camino, pero a 200 metros antes, y aunque no es mayor de 1 metro, por dentro se hizo una cueva, misma que está a punto del colapso.
Personal de Protección Civil acudió al lugar para supervisar la zona y acordonó los dos puntos de riesgo, prohibiendo el paso vehicular y peatonal.
También una cuadrilla de trabajadores de la Dirección de Obra Pública Municipal, así como ingenieros civiles acudieron al lugar para evaluar los tres socavones y realizar los trabajos correspondientes. (AM).
