El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, tomó distancia este lunes del conflicto interno que se vive en el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), partido que él fundo en 2011, respecto a la renovación de su dirigencia.
El mandatario evitó, como en anteriores ocasiones, hablar de temas relacionados con el partido que lo llevó al poder.
Nada, nada, nada, (guardo) silencio, pero no cómplice, no me corresponde (hablar del tema)
Fue la respuesta de López Obrador al ser cuestionado sobre el sexto Congreso Nacional Extraordinario de Morena que se llevó a cabo este domingo y exhibió las desavenencias internas.