Al menos dos personas que murieron entre principios y mediados de febrero tenían coronavirus en California, lo que echa por tierra las hipótesis de que el SARS-CoV-2, que provoca la enfermedad COVID-19, hubiera llegado con posterioridad a los Estados Unidos. La novedad se descubrió a partir de dos autopsias realizadas durante las últimas semanas sobre dos víctimas que fallecieron en el interior de sus casas sin haber presentado signos visibles del mal nacido en Wuhan, China.
La noticia se conoció por medio de un comunicado emitido por las autoridades sanitarias del estado. El primer muerto de coronavirus en California se había establecido el pasado 9 de marzo. Sin embargo, los nuevos casos revelaron que en verdad el primero de esos fallecimientos por lo menos ocurrieron el 6 de febrero, más de un mes antes de reportarse el supuesto primer caso, lo que indica que la cepa mortal circulaba por aquel estado desde mucho antes de lo que se creía. Además de los dos casos de febrero, también se estableció otra muerte tres días antes de la fecha original considera como primera.
“El forense del condado de Santa Clara ha identificado a tres personas que murieron con COVID-19 en el condado antes de la muerte asociada con COVID-19 el 9 de marzo de 2020, que originalmente se pensó que era la primera muerte asociada con COVID-19 en el condado”, señala el comunicado local. “El médico forense realizó autopsias a dos personas que murieron en su casa los días 6 y 17 de febrero de 2020. Se enviaron muestras de las dos personas a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Hoy el perito recibió la confirmación de los CDC de que las muestras de tejido de ambos casos son positivas para SARS-CoV-2 (el virus que causa COVID-19)”.
Adicionalmente, agrega la información oficial, una tercera muerte fue registrada como de coronavirus el 6 de marzo.
“Estas tres personas murieron en sus hogares durante un tiempo en que las pruebas eran muy limitadas y solo estaban disponibles a través de los CDC. Los criterios de prueba establecidos por los CDC en ese momento restringieron las pruebas solo a personas con un historial de viajes conocido y que buscaron atención médica para síntomas específicos. Mientras el médico forense continúa investigando cuidadosamente las muertes en todo el condado, anticipamos que se identificarán muertes adicionales por COVID-19″, concluye el comunicado.
“El hecho de que hubo muertes relacionadas con la COVID-19 a principios de febrero es muy significativo porque significa que el virus estuvo mucho más tiempo de lo que se pensó inicialmente”, dijo Jeff Smith, médico y ejecutivo del condado en Santa Clara, a The Washington Post. “Ha existido por un tiempo y probablemente se ha estado extendiendo en la comunidad durante bastante tiempo”.
Uno de los estados, más golpeados
El de California es uno de los estados más afectados por la pandemia. A tal punto que las autoridades del condado de Los Ángeles, en Estados Unidos, estiman que el número de infectados de coronavirus en el condado podría ser mucho mayor del reportado hasta el momento. Un estudio revela que el índice podría ser hasta 55 veces mayor. La investigación desarrollada por la Universidad del Sur de California y el Departamento de Salud Pública de Los Ángeles encontró que cerca del 4,1% de la población adulta del condado tiene anticuerpos contra la COVID-19, estimando que entre 221.000 y 442.000 podrían haber estado infectados, indicó CNBC.
A principios de abril, los casos confirmados en el condado eran casi 8.000. De esta manera, la estimación del estudio es de 28 a 55 veces mayor que los datos oficiales. El número de muertos relacionadas con el coronavirus, por su parte, ya han superado los 600, según el Departamento de Salud Pública. De confirmarse todos los decesos por COVID-19, la tasa de mortalidad del condado es menor de lo que se pensaba en un principio.
El estudio consiste en pruebas de anticuerpos de unas 863 personas del condado, indicaron los investigadores.