El cierre de diversas empresas en México para frenar la pandemia de Covid-19 está afectando la producción de armamento en Estados Unidos. Es por eso que la administración del presidente Donald Trump pedirá al gobierno de México la reapertura de estas empresas, informaron este lunes representantes del Pentágono.
El pasado 30 de marzo el Consejo de Salubridad General de México emitió una declaratoria de emergencia que obligó a la suspensión de actividades no esenciales, lo que afectó a diversas cadenas de suministros, algunas consideradas clave para la industria armamentística de EEUU.
“México en este momento es algo problemático para nosotros”, dijo el jueves en una rueda de prensa sobre los efectos de la pandemia en los procesos de compras y alistamiento la subsecretaria de Defensa de EU para Adquisiciones y Apoyo, Ellen Lord.
El sector más afectado por este cierre temporal de compañías de contratistas de armamento es la aviación, particularmente la construcción de aviones.
“Estamos viendo impactos en bases industrial por diversos focos de cierre a nivel internacional. México es particularmente notable, porque tenemos un grupo de empresas que están afectando a muchas de nuestras principales compañías”, explicó Ellen Lord. "Con respecto a México, el viernes hablé con nuestro embajador de EU (Chris Landau) para pedirle ayuda para que reabran nuestros proveedores internacionales ahí. Estas compañías son especialmente importantes para nuestra producción de fuselaje en EU”.
De acuerdo con un reporte de la Comisión Internacional de Comercio (USITC, por sus siglas en inglés), grandes consorcios de armamento aeroespacial en EEUU tienen proveedores en territorio mexicano, incluidas empresas como Lockheed Martin, Honeywell y General Dynamics, entre otras.
Mike Pompeo, secretario de estado de EEUU, dijo que recibió llamadas de compañías estadounidenses con operaciones en México, las cuales le pidieron la reactivación de las cadenas de suministro tras la suspensión de actividades no esenciales.
López Obrador, por su parte, aseguró que a principios de mayo se autorizará la reapertura de las plantas de autopartes en territorio mexicano; tan pronto como la industria automotriz de EEUU reinicie labores.
Los tres principales fabricantes estadounidenses General Motors (GM), Ford y Fiat Chrysler (FCA) quieren reiniciar de forma progresiva sus labores.
La Asociación Nacional de Manufacturas (NAM, por sus siglas en inglés) solicitó el miércoles pasado al Gobierno de México que reconsidere el cierre de fábricas ante la emergencia sanitaria del COVID-19.
“En un momento en el que necesitamos aumentar la producción de equipos de protección personal y medicamentos que salvan vidas, no podemos permitirnos tener cerradas las cadenas de suministro críticas si México no emite una guía que clarifique si las industrias manufactureras entran en la categoría de esenciales”, señaló la asociación en un comunicado.
Infobae