Una desagradable sorpresa se llevó don Eduardo cuando regresó a su casa en Iztapalapa y halló las cerraduras violadas, pero lo peor es que en su recámara estaba el cadáver de una mujer.
El hallazgo ocurrió durante los primeros minutos del sábado, cuando el hombre —de 56 años— ingresó a su vivienda en el condominio 17, ubicado sobre avenida de Las Torres, colonia Tulyehualco Canal de Garay.
Don Eduardo narró a los agentes del sector Tezonco que había salido y al regresar encontró la puerta abierta y el cuerpo de una mujer en condición de calle en la parte superior de su litera. También contó que desde hace años su hijo Érick, de 36 años, vivía en indigencia debido al alcoholismo y la drogadicción, por lo que sospechó que él fue quien forzó las chapas para ingresar.
“Posiblemente pudo haber sido su hijo (…) quien la metió al domicilio para drogarse, ya que es drogadicto y alcohólico”, señalan los informes.
Rescatistas de Protección Civil local en la unidad médica 09 diagnosticaron el deceso sin signos de violencia ni de algún tipo de arma. El cadáver sin identificar de la mujer fue llevado al Servicio Forense, donde se determinarán las causas de muerte y se espera que sea identificada.
