Pese a las indicaciones de las autoridades, aglomeraciones de personas se registraron en las alcaldías de Venustiano Carranza y Cuauhtémoc a celebrar el Día de muertos frente a los diferentes altares de La Santa Muerte a pesar de la existencia de un riesgo por regresar al semáforo rojo en las colonias como la Morelos.
Imágenes de la agencia Cuartoscuro evidencian las aglomeraciones de personas frente al altar ubicado en Tepito. Mujeres, hombres, niños y hasta adultos mayores se dieron cita para celebrar el Día de muertos este dominngo 1 de noviembre sin miedo al contagio de Covid-19.
Sin respetar la sana distancia y algunos sin cubrebocas, decenas de personas se congregaron en el altar del barrio de Tepito, en la calle de Alfarería para llevar arreglos florales, ofrendas y hasta mariachi a La Santa Muerte este 1 de noviembre como muestra de devoción.
Culto antes que la salud
Recientemente, el listado de 158 colonias en Atención Prioritaria fue actualizado por las autoridades y sumaron 12 colonias al programa. Entre ellas, una colonia de Álvaro Obregón, una de Azcapotzalco, Dos de Benito Juárez , una de Gustavo A, Madero,una en Iztacalco, dos en Miguel Hidalgo, dos en Tláhuac y dos más en Venustiano Carranza.
Fue apenas la semana pasada cuando las autoridades llamaron a festejar desde casa con distintas actividades como la Ofrenda Infinita y las distintas actividades y dinámicas en línea para hacer frente a la festividad durante la pandemia por covid-19 en la que aún nos encontramos.
El culto a la Santa Muerte tiene un pasado enigmático y según diversos investigadores se remonta a 1795, cuando los indígenas adoraban un esqueleto en un poblado mexicano.
Se mantuvo en secreto durante casi dos siglos, y en la capital empezó a proliferar en la década de los cuarenta del siglo XX.
La eclosión del fenómeno, que dice tener unos doce millones de fieles en todo el mundo, se produjo a mediados de los noventa.
Con información de EFE
