El antiviral PF-07321332 se administra como una pastilla y
podría funcionar para detener la replicación del SARS-CoV-2 desde los primeros
síntomas.
El camino para detener la pandemia de COVID-19 no
sólo requiere de la vacunación acelerada de la mayor cantidad posible de
personas, también de tratamientos eficaces para quienes no tienen
acceso a la inoculación o bien, pacientes enfermos de coronavirus con el riesgo
de sufrir de una enfermedad grave.
De ahí que la búsqueda de terapias efectivas y seguras sea
tan importante como el desarrollo en tiempo récord de las vacunas disponibles
hasta la fecha.
El último gran prospecto es un antiviral oral
desarrollado por Pfizer, que podría detener la replicación del virus desde sus
primeros síntomas. En un comunicado publicado este 23 de marzo, la
farmacéutica estadounidense dio a conocer el inicio de ensayos clínicos de fase
1 del candidato antiviral, denominado PF-07321332.
El prospecto es un antiviral inhibidor de la proteasa,
es decir, su mecanismo de acción se basa en bloquear una enzima clave en el
desarrollo de los nuevos virus, evitando su correcta formación y por lo tanto,
disminuyendo su capacidad de replicación. Los inhibidores de la proteasa son
ampliamente utilizados en tratamientos contra virus como el VIH y la hepatitis
C.
Según Pfizer, PF-07321332 ha demostrado actividad
antiviral en pruebas in vitro contra el virus SARS-CoV-2 y
podría ser una terapia oral eficaz para detener la evolución de la enfermedad a
partir de sus primeros síntomas, sin la necesidad de que hospitalizar a
los pacientes o mantenerlos en una unidad de cuidados intensivos, tal y como
ocurre con otros medicamentos que se prueban contra COVID-19.
El estudio de fase 1 probará la seguridad, tolerabilidad y
el proceso que sigue el fármaco desde que se administra y hasta que se desecha
del organismo (farmacocinética), uniéndose a PF-07304814, un tratamiento
antiviral de la misma farmacéutica que ya se está probando en pacientes
hospitalizados.
A principios de diciembre de 2020, Pfizer se convirtió en la
primera farmacéutica cuyo desarrollo de vacuna se aplicó masivamente en todo el
mundo.
Y aunque la lista de antivirales con potencial para resultar
efectivos y seguros contra COVID-19 sigue creciendo, hasta el momento el único tratamiento
de esta naturaleza aprobado para uso de emergencia en México y Estados Unidos
es el remdesivir, un fármaco envuelto en polémica debido a su alto precio
y las evidencias de su eficacia en pacientes con COVID-19 grave.
