La familia de Lara Arreguiz, la joven de 22 años que el
viernes pasado falleció en un hospital de esta capital, como consecuencia del
Covid-19, y luego de varias desatenciones en centros de salud locales, radicó
este miércoles una denuncia penal contra tres hospitales, dos de Santa Fe y el
restante de Recreo, Argentina, para que se investigue si se trató de un
homicidio con dolo eventual y abandono de persona.
La denuncia fue presentada por el abogado Diego Loréfice
(junto con el letrado Fernando Burlando). Según trascendió, la misma apunta a
los directivos de las instituciones, al personal médico y enfermería que
atendió a la joven y a la seguridad del Protomédico, de Recreo, el primer
destino del traslado de la joven desde Esperanza, 45 kilómetros al oeste de
esta capital, donde residía por sus estudios universitarios.
El fiscal de la Unidad Especial de Homicidios, del
Ministerio Público de la Acusación (MPA), Andrés Marchi, deberá determinar
próximamente si da curso a la denuncia e inicia una investigación penal
preparatoria contra el personal que actuó durante la internación de la joven
oriunda de Esperanza.
La primera medida dispuesta es la realización de la
necropsia, que se realizará este jueves, día en que la familia tenía turno para
la cremación del cuerpo de la joven.
El criterio del entorno de la estudiante de la carrera de
Veterinaria, cuya imagen acostada en el piso de un hospital aguardando ser
asistida recorrió el país, cuando se había descompuesto ya que además de
coronavirus era una paciente de alto riesgo por ser insulino-dependiente, fue
anticipado a La Nación por la madre de Lara. En diálogo con este diario,
Claudia Sánchez sostuvo ayer: “No nos van a devolver a Lara, pero vamos a
intentar que lo que a ella le sucedió no le ocurra a otro insulino-dependiente.
Los tres médicos que me enviaron a casa a que espere cómo podía evolucionar el
estado de Lara, que piensen en la gente. Sé que hay un colapso por la pandemia.
Pero los médicos seguían atendiendo por las listas que tenían y nunca aceptaron
mirar hacia mi hija que se estaba muriendo”, enfatizó.
La denuncia fue presentada este miércoles por el abogado
Diego Loréfice (junto con la firma del letrado Fernando Burlando).
Según trascendió, la misma apunta a los directivos de las
instituciones, al personal médico y enfermería que atendió a la joven y a la
seguridad del Protomédico, de Recreo, el primer destino del traslado de la
joven desde Esperanza, 45 kilómetros al oeste de esta capital, donde residía
por sus estudios universitarios.
El de la Unidad Especial de Homicidios, del Ministerio
Público de la Acusación (MPA), Andrés Marchi, deberá determinar próximamente si
da curso a la denuncia e inicia una investigación penal preparatoria contra el
personal que actuó durante la internación de la joven oriunda de Esperanza.
Loréfice declaró a emisoras radiales locales que la denuncia
“no solo implica a directivos sino también va contra el personal médico y de
seguridad de los tres nosocomios por los que deambuló Lara antes de conseguir
una cama. La denuncia es por homicidio con dolo eventual y abandono de persona,
es decir, aquella persona que con su conducta puede causar la muerte de otra,
no obstante asume ese riesgo y sigue adelante. Es lo que nosotros entendemos,
se verá con el correr del proceso cuáles son las evidencias que recolectamos
pero este sería el tenor de lo que se denuncia”, aportó.
Además, el abogado recordó lo que consideró como “el triste
derrotero” que atravesó Lara antes de conseguir una cama. Y aseguró: “No le
prestaron la debida atención hasta que se fue complicando el cuadro. La joven
solo permaneció en el área de terapia intensiva durante cinco o seis horas. El
mayor tiempo no estuvo debidamente atendida por los facultativos que debieron
prestarle atención debido al cuadro que tenía”, insistió, para luego adelantar
que se solicitará una lista con todas las personas que se vieron involucradas
en la asistencia.
Orífice adelantó también que la próxima semana se
constituirá como querellante en la causa para así poder aportar evidencia al
fiscal Marchi. Entre esas pruebas, se encuentran los chat que mantuvo la madre
de Lara con su hija cuando esta se encontraba internada.
Adelantándose a lo que finalmente ocurrió en la Justicia, la
mamá reveló lo que siempre buscó Lara: “Que hay que luchar, no quedarse
callado. Luchar por derecho a la vida, especialmente”, subrayó.
El Caso de Lara
Lara Arreguiz falleció el viernes a la madrugada en la
terapia intensiva del viejo Hospital Iturraspe, de esta capital. Antes estuvo
internada en el nuevo edificio de dicho nosocomio y en el Protomédico.
Su estado se fue deteriorando como consecuencia de la diabetes,
complicada con el Covid-19. Su familia debió aguardar cuatro días hasta que
finalmente las autoridades sanitarias le otorgaron una cama en terapia
intensiva, donde debió ser entubada dada las complicaciones para respirar.
En el pasillo del nuevo Hospital Iturraspe, Lara se sintió
descompuesta y cuando pidió recostarse en una camilla que se encontraba en un
pasillo, no se lo permitieron. Ella decidió entonces acostarse en el piso. Fue
allí cuando una mujer que se encontraba en el lugar se acercó y la cubrió con
una campera. Su madre, indignada e impotente, tomó esa fotografía y la subió a
sus redes como una forma de denunciar lo que estaba ocurriendo en el efector de
salud.
Las autoridades sanitarias, hasta esta noche, no habían
ordenado el sumario habitual en estos casos para deslindar las
responsabilidades del personal actuante.
Fuente: El Universal