Ciudad de México. El derecho a la propia imagen deriva de la
dignidad humana y está protegido por el Derecho de Autor, así lo señaló la SCJN
al fallar a favor de la conductora de televisión Ingrid Coronado Fritz, para
que reciba una indemnización por la publicación de fotos de ella y su hijo sin
su autorización en una revista de espectáculos.
El litigio comenzó cuando la publicación de editorial
Notmusa incluyó imágenes de la conductora, sin su consentimiento. Ella demandó
entonces a la empresa ante instancias civiles, quienes reconocieron que se le
causó un daño moral, pero se negaron a establecer una reparación económica.
Esta determinación fue recurrida ante la SCJN, cuya primera
sala determinó que el derecho a la propia imagen sí es protegido por el Derecho
de Autor, por lo que corresponde pagar a la conductora una indemnización.
Derecho a la imagen
El proyecto aprobado fue presentado por el ministro Juan
Luis González Alcántara Carrancá y en él se sostiene que el derecho a la propia
imagen debe considerarse fundamental, y como tal, incluido implícitamente en el
artículo primero de la Constitución.
“A diferencia de los derechos de autor, que nacen de la
creación literaria o artística, el derecho a la propia imagen está
indisolublemente ligado a la individualidad de la persona”, añade la sentencia
aprobada, donde se explica que, como la revista obtuvo un lucro explotando la
imagen de la conductora, la editorial debe responder de manera económica.
El expediente del caso se remitió al tribunal de origen para
relabore su sentencia, tomando en cuenta la imposición de la indemnización, y
fije su cuantía, la cual no deberá ser menor a 40 por ciento de las ganancias
obtenidas con la venta de la revista.
Al respecto, la especialista en derecho a la propia imagen,
Brenda Rangel González, advirtió que es necesario legislar en esta materia para
hacer su ejercicio accesible a todos, y no solo a personalidades.
“El derecho a la propia imagen es intrínseco a la persona, y
no puede tasarse en dinero”, pues cuando es vulnerado requiere de una
reparación integral, que implica medidas sicológicas y no solo monetarias,
explicó la especialista.
Fuente: La jornada