En los primeros cinco años de la presente administración se redujo en 43% el gasto para mantenimiento de infraestructura de Petróleos Mexicanos (Pemex) en comparación con el mismo lapso del sexenio anterior, según se verificó a casi una semana del incendio en el centro Nohoch Alfa en aguas someras del Golfo de México.
Lo anterior significa que en los primeros cinco años del sexenio pasado, se asignó para actividades de mantenimiento de infraestructura el 4% del presupuesto total de la petrolera del Estado, participación que bajó a 2.4% en el mismo lapso de este sexenio.
Como se observa en el rubro etiquetado como K027 en el Análisis Funcional Programático Económico Efectivo del Presupuesto de Egresos de la Federación de la Secretaría de Hacienda, entre el 2013 y el 2017 el Congreso aprobó para estas actividades un acumulado de 132,880 millones de pesos en términos reales a precios del 2023 al presupuesto consolidado de Pemex, monto que entre 2019 y 2023 se redujo a 76,240 millones de pesos.
Si bien, en 2023 se asignó al rubro un total de 23,336 millones de pesos, monto 2.3 veces superior a los 9,760 millones de pesos del año anterior, en el acumulado del sexenio se han observado reducciones en actividades que van relacionadas con la prevención de accidentes como el que ocurrió el viernes pasado que quitó la vida a dos trabajadores de la contratista Cotemar y tiene a un desaparecido en el centro procesador del activo Cantarell en aguas someras, Nohoch Alfa, incidente que además provocará una merma de más de 3,500 millones de pesos en ingresos por pérdida de producción de la petrolera.
Y es que en lo que va del sexenio de Andrés Manuel López Obrador se han otorgado los presupuestos más bajos para mantenimiento de infraestructura de Pemex de por lo menos la última década. En 2019, el primer año que contó con un presupuesto aprobado por el Congreso saliente y solicitado por el Ejecutivo del sexenio anterior, se cayó hasta 10,640 millones de pesos, monto de menos de la mitad de los 25,120 millones de pesos que se otorgaron en el último año de gestión de Enrique Peña Nieto.
Para el 2020, en que la asignación presupuestaria no contó con que se desencadenaría el paro de actividades por la pandemia del Covid 19, el presupuesto se duplicó en comparación con el año anterior, ubicándose en 20,410 millones de pesos, monto que si bien implicó un aumento, sólo fue superior al del 2017, ya que todos los presupuestos asignados para estas actividades desde el 2015 superaron este gasto.
Y en 2021, se volvió a reducir el gasto, que ahora se ubicó en 12,130 millones de pesos, cifra 36% menor a lo que se aprobó el año anterior. A pesar de que los dos años siguientes a la crisis del 2020 deberían buscar la recuperación económica de la industria de los hidrocarburos, en 2022 bajó nuevamente el presupuesto para mantenimiento de infraestructura de Pemex, que se redujo a 9,800 millones de pesos, la segunda asignación más baja desde el 2012, con una reducción anual de 13 por ciento.
Además el año pasado, el presupuesto para mantenimiento de infraestructura de Pemex fue de la mitad del que se otorgó en el cuarto año del sexenio anterior, como se observa en el Presupuesto de Egresos de la empresa productiva del Estado.
Según reportó El Economista, en materia de seguridad en el trabajo, las cifras de Petróleos Mexicanos se han elevado en 40% que son 0.10 accidentes por horas hombre en riesgo más al año en comparación con el inicio de este sexenio. Este índice es 59.1% mayor al estándar internacional de 0.22, establecido por la Asociación Internacional de Productores de Gas y Petróleo (IOGP).
karol.garcia@eleconomista.mx