Estados Unidos alertó que el tráfico de fentanilo es su mayor amenaza para 2024. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) añadió, en su estudio anual de amenazas, que “las organizaciones criminales transnacionales (OTC) en México, particularmente el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación, siguen siendo los principales contrabandistas de fentanilo y otras drogas hacia Estados Unidos”.
Detalló que “estas organizaciones continúan utilizando el soborno y la violencia para hacer crecer su operaciones de contrabando y producción de narcóticos en México, y tiene una dependencia de empresas en China para comprar productos químicos precursores de fentanilo y equipos para prensar pastillas”. Agregó que “además de la persistente amenaza terrorista, esperamos que las drogas ilegales producidas en México y vendidas en Estados Unidos seguirán matando a más estadounidenses que cualquier otra amenaza”.
Alertó que “durante el año pasado, los traficantes con base en Estados Unidos se han involucrado más en la mezcla y prensado de fentanilo, contribuyendo a mezclas más letales de esta ya existente droga mortal”. Agregó que “el tráfico ilegal de narcóticos daña a nuestras comunidades al apoyar a grupos violentos, empresas criminales, lavado de dinero y corrupción”.
En la frontera, de acuerdo con el reporte, “las incautaciones continúan aumentando a lo largo de 2023” con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza “[CBP] en camino de decomisar una cantidad récord de fentanilo que ingresa a EU (...) Las incautaciones de cocaína, heroína y metanfetamina se han mantenido estables o han disminuido, cada año fiscal desde 2020. Sin embargo, las fuerzas del orden de EU se enfrentan cada vez más a casos en los que muchas de estas drogas se mezclan con fentanilo”. Detalló que “los opioides sintéticos, incluidas drogas como el fentanilo y el tramadol, han sido responsables de casi 75% de las sobredosis durante el último año”.
El DHS alertó que las organizaciones criminales transnacionales, “con sede en México, incluidas las organizaciones de tráfico de personas, están aprovechando los sistema de aeronaves pequeñas no tripuladas para mejorar y proteger sus operaciones. En 2022 y 2023, los funcionarios estadounidenses observaron a traficantes de personas utilizando vehículos aéreos no tripulados disponibles comercialmente para monitorear a los migrantes y a la fuerza de la ley a través de la frontera”. Además, usan pequeños drones “comerciales para aumentar el contrabando de drogas y vigilar las actividades policiales de Estados Unidos y México, ayudándoles a evitar algunas operaciones de interdicción”. El DHS también dijo que “es casi seguro que las organizaciones criminales transnacionales “seguirán traficando drogas a nuestro país y al mismo tiempo explotarán a los inmigrantes para obtener beneficios económicos”. Agregó que “estas organizaciones criminales probablemente buscarán nuevas tecnologías y desarrollarán técnicas novedosas para mejorar su capacidad de evadir nuestras medidas de seguridad fronteriza”.
Sobre la migración, el DHS informó que “también nos hemos encontrado con un número creciente de personas en el conjunto de datos de detección de terroristas, también conocida como ‘lista de vigilancia’”.
El departamento mencionó, además, “que es probable que los adversarios nacionales y extranjeros sigan atacando nuestra infraestructura crítica durante el próximo año, en parte porque perciben que apuntar a estos sectores sería perjudicial para las industrias”.
Sobre el proceso electoral del año que entra, declaró que “esperamos que el ciclo (...) sea un evento clave para una posible violencia e influencia extranjera dirigida a nuestros infraestructura electoral, procesos y personal”.
Sobre China, dijo que “probablemente siga manipulando mercados, empleando espionaje económico y herramientas económicas coercitivas, y buscando adquirir ilícitamente nuestras tecnologías y propiedad intelectual (...) los actores criminales con motivación financiera adaptan nuevos métodos para mejorar capacidad de extorsionar financieramente”.
Además, “el cambio climático, desastres naturales y avances tecnológicos tienen potencial de agravar estas amenazas” y “la proliferación de herramientas de inteligencia artificial (IA) accesibles probablemente reforzará las tácticas de nuestros adversarios (...) están utilizando IA para crear información errónea, desinformación, mientras que actores cibernéticos utilizan IA para desarrollar herramientas” a fin de “permitir ciberataques a mayor escala, más rápidos, eficientes e invasivos”.
