La sudoración nocturna es uno de los síntomas más característicos de la menopausia, es por ello que muchas mujeres podrían creer que se acerca el final de su etapa fértil. Sin embargo, esta señal podría revelar serios problemas de salud, como el caso de una mujer que creyó tener menopausia, pero le diagnosticaron cáncer.
¿Cómo se dio cuenta la mujer con sudoración nocturna que tiene cáncer?
Susete Ferreira, una mujer de 41 años de edad, originaria de Toronto, Ontario, en Canadá, pensó durante meses que su etapa reproductiva estaba llegando a su fin tras presentar continuamente sudoración nocturna, uno de los principales síntomas de la menopausia, hasta que desarrolló un dolor abdominal tan intenso que llamó su atención.
De acuerdo con declaraciones de la mujer, comenzó a sentir un dolor fuerte debajo de las costillas que no desaparecía tan fácilmente, razón por la que decidió acudir con un médico para identificar la causa. El especialista le realizó una ecografía y posteriormente una tomografía computarizada que detectó una anomalía en sus ganglios linfáticos.
"Comencé con un dolor muy agudo en el lado derecho, debajo de las costillas. Pensé que tal vez iba a desaparecer, pero después de cuatro días de dolor que desaparecía y volvía, fui a la sala de emergencias", dijo Susete en entrevista.
Tras días después de ser ingresada a la sala de urgencias, los médicos le extirparon la vesícula y le tomaron una biopsia que confirmó linfoma folicular en etapa 4. Por ello, la mujer decidió compartir su historia a través de redes sociales para concientizar a otras mujeres que podrían encontrarse en su situación.
¿Qué es el linfoma folicular?
El linfoma folicular es un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático, un componente esencial para nuestro sistema inmunológico. De acuerdo con información del Instituto Médico Cleveland Clinic, se caracteriza por el crecimiento anormal de los linfocitos, un tipo de glóbulos blancos, dentro de los folículos linfáticos.
La causa exacta del linfoma folicular es desconocida. Sin embargo, los investigadores sugieren que los cambios genéticos en los linfocitos podrían desencadenar su desarrollo. Estos cambios incluyen la translocación de genes, que afecta a cómo se dividen y crecen las células, así como la exposición a ciertos virus, pesticidas y solventes.
Entre los principales síntomas de alerta se encuentran la inflamación indolora en el cuello, axila o ingle causada por el agrandamiento de los ganglios linfáticos, fiebre, pérdida de peso, sudoración, escalofríos y cansancio extremo. Si padeces algunos de estos síntomas, acude con tu médico.
¿Por qué el linfoma folicular puede causar sudoraciones?
Este tipo de cáncer puede causar sudoraciones nocturnas intensas debido a la respuesta del cuerpo ante la presencia de células cancerosas en el sistema linfático. De ahí que muchas mujeres lo confunden con menopausia. Sin embargo, esta reacción es parte de la lucha del sistema inmunológico contra la enfermedad.
Las células cancerosas pueden provocar fiebre y, como mecanismo de enfriamiento, el cuerpo responde con sudoración. Además, la producción de sustancias químicas inflamatorias por las células tumorales puede interferir con la regulación normal de la temperatura corporal, llevando a episodios de sudores intensos.
Aunque Susete Ferreira lucha contra el cáncer, asegura que el diagnóstico de esta enfermedad le dio una perspectiva diferente sobre la vida y que ahora trata de concientizar a las mujeres para que se realicen sus chequeos de rutina.
