Una perrita llamada Lía fue quemada con agua hirviendo en el municipio de Motul, en Yucatán. El agresor fue identificado, aunque las autoridades policiacas aún no lo han detenido.
De acuerdo con el colectivo Peludos Felices, la canina estaba afuera de su casa, bajo un árbol, cuando el vecino, sin razón aparente, le arrojó agua caliente en la cabeza, causándole múltiples lesiones tanto en su piel como su pelaje.
A pesar de que Lia recibió atención veterinaria para sanar las heridas, el incidente provocó indignación en el municipio yucateco.
“Se interpuso la denuncia correspondiente en la Fiscalía General del Estado de Yucatán, esperemos que se tomen cartas sobre el caso, ya que pudimos averiguar que no es la primera ocasión que este señor lastima a los animalitos”, escribió el colectivo en sus redes sociales.
Es importante recordar que, en Yucatán, de acuerdo con la “Ley Rufo”, una persona que cometa maltrato o violencia contra algún animal puede enfrentar hasta 10 años de prisión.