López Obrador no se resistirá ‘las ganas’ de impulsar alguna de las reformas pendientes, por lo que posiblemente buscará acelerar la aprobación de la reforma en el Poder Judicial durante el último mes de su mandato, así coincidieron los expertos consultados por El Financiero.
“No se se va a aguantar las ganas, por supuesto va a querer cerrar su presidencia con cambios, el Congreso inicia sesiones en septiembre y tiene todo un mes (…) para pedir el voto”, dijo el analista Salvador Camarena.
En el Foro MeetPoint “El país que tendremos después del 2 de junio”, moderado por Enrique Quintana, el especialista Federico Berrueto indicó que el presidente López Obrador contaría con una mayoría en la Cámara de Diputados para aprobar una reforma al Poder Judicial, pero esto únicamente infringiría en la pluralidad de México.
“Hubo una serie de reformas siempre con la idea de incorporar la pluralidad mucho más en México (…). Si sacamos el sistema de representación proporcional y nos vamos al sistema de mayoría simple (…) lo que tendríamos sería la exclusión de distintas fuerzas políticas de representación”, mencionó Berrueto.
“Sería un cambio clarísimo de régimen, me atrevo a decir un régimen con perfil claramente autoritario. Hay otros elementos de la reforma que tienen que ver con un presidencialismo sin limitaciones”, añadió.
Por su parte, María Marván, miembro del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, indicó que el presidente López Obrador desearía impulsar todas las reformas pendientes. Sin embargo, el tiempo se lo impediría y esto lo obligaría a enfocarse en las reformas referentes a los organismos judicial y electoral.
“Yo creo que a partir de ahorita, y a lo largo del sexenio de Claudia, vamos a ver de dónde viene el nuevo sistema de contrapeso que evidentemente no va a venir ni de la división de poderes, ni de lo que pueda o no hacer el congreso”, explicó la especialista.
El especialista Berueto consideró que para AMLO también podría ser una consecuencia tener a más de 315 representantes en la Cámara de Diputados, debido a que el marco de la ley lo prohíbe.
“Mi impresión es que vamos más hacia un escenario de una sobrerepresentación excedida, y esto le dará una capacidad ganadora para poder transformar el régimen a espaldas de la oposición, tal como se había configurado previsto en el proceso de reforma política desde hace tiempo”, mencionó el especialista Berueto.
Incluso la especialista María Marván no descarta la posibilidad de que surja algún tipo de conflicto al interior del partido Morena, debido a que la postura de Claudia Sheinbaum podría ser muy diferente a la de López Obrador, pero esto podría ocurrir previo a la entrada de la nueva presidenta de la República.
“La tensión fundamental vendrá al interior de Morena y la relación con los personajes (…), y en este caso en específico habrá que ver su existe cierta tensión entre Claudia entrante y López Obrador, el presidente saliente. Hasta ahora no la hemos visto”, finalizó la analista de la UNAM.