Aquel funesto día, el campesino maya de 40 años de edad salió de su casa hacia su parcela, a donde llegó a la primera hora de la mañana, pero mientras trabajaba sintió una mordedura justo detrás de la rodilla izquierda, en ese hueco rico en ganglios linfáticos y en estructuras vasculares y nerviosas.
Presa del susto y del dolor, el hombre se cayó y sufrió traumatismo craneoencefálico.
Era el mediodía cuando su familia lo halló semiinconsciente y pidió ayuda. Paramédicos le pusieron un torniquete en la pierna y una venda en la cabeza, luego lo llevaron al hospital local, a donde llegó cinco horas después del percance. Ahí, un médico le halló moretones en el cuerpo, taquicardia e insuficiencia renal.
Por los síntomas se determinó que la serpiente que lo mordió fue, presuntamente, una nauyaca (Bothrops asper). En Yucatán se le conoce como cuatro narices, muy temida porque es muy venenosa y de comportamiento nervioso y agresivo, según describe Ekuneil Península de Yucatán.
Al campesino lo trataron con 15 viales de suero antiveneno, esteroides y antibióticos. Luego lo enviaron al hospital O’Horán, en Mérida, a donde llegó ocho horas después de la mordedura y le diagnosticaron falla orgánica múltiple, aumento de presión –muy doloroso– en su pierna izquierda por sangrado interno, hemorragia severa del tracto digestivo y traumatismo craneoencefálico.
Lo internaron en Urgencias, donde lo sedaron, lo pusieron en respiración asistida, le dieron medicinas intravenosas, le hicieron una cirugía en la pierna, pues se hinchó total y dolorosamente, y se le inició terapia intensiva porque, además de las hemorragias, se le formaban pequeños coágulos de sangre.
Al segundo día una tomografía computadorizada confirmó las lesiones de la cabeza, se le hizo hemodiálisis por la insuficiencia renal aguda, y se le transfundió plaquetas por el sangrado persistente.
Tres días de agonía
A pesar de todo ello, el campesino maya falleció al tercer día de agonía. La causa de la muerte, en el certificado de defunción, fue mordedura de serpiente, shock por pérdida de sangre e insuficiencia renal aguda.
Este trágico caso, publicado por cuatro médicos y una enfermera en la revista científica RRH Salud en Zonas Remotas y Rurales, confirma que recibir atención médica rápidamente es un asunto de vida o muerte para la persona mordida por una serpiente.
En México, tan solo del 1 de enero al 31 de agosto de 2024, 1,405 personas sufrieron una mordedura de serpiente (cifra que ya supera a los 976 habitantes de Quintana Roo, el municipio menos poblado de Yucatán), informa la Secretaría de Salud federal (SSA).
De hecho, Yucatán es el décimo estado de México con más gente mordida por serpientes, con 46 víctimas: 16 por cascabel, una por coral y 29 por otras especies. En promedio, cinco casos al mes, o uno cada seis días.
Específicamente por los tres grupos que vigila la SSA, Yucatán es el décimo tercer estado con más casos de mordedura de cascabel (Chihuahua es el líder, con 77), uno de los ocho estados con solo un caso de mordedura de coral (Chiapas encabeza la lista, con nueve), y el séptimo con más casos de mordeduras de otras serpientes (Veracruz es el líder, con 166).
Por los casos totales, el líder nacional es Veracruz, con 180 personas mordidas: 13 por cascabel, una por coral y 166 por otras serpientes; mientras que Aguascalientes y Guanajuato cierran la lista nacional, con dos casos cada uno.
En la península yucateca, 77 personas fueron mordidas por serpientes: 46 en Yucatán, 20 en Campeche y 11 en Quintana Roo. Los dos últimos son el noveno y sexto estados del país con menos casos totales.
Por género, la mayoría de las víctimas de mordeduras de serpiente son hombres: 962 en México (443 son mujeres), 32 en Yucatán (14 mujeres), 14 en Campeche (seis) y siete en Quintana Roo (cuatro mujeres).
Hoy 19 de septiembre, Día Internacional de Concienciación sobre la Mordedura de Serpiente, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recuerda que la meta para el año 2030 es reducir en un 50% la mortalidad y discapacidad por mordedura de serpiente, y que para lograrlo es importante que la gente sepa qué hacer en este caso.
Con información de Megamedia