La Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) puso la lupa otra vez sobre el sector energético. En esta ocasión, la autoridad investiga presuntas prácticas anticompetitivas en el mercado de comercialización, distribución y expendio al público de gasolinas y diésel.
Hace apenas 15 días, el órgano regulador anunció la averiguación en el mercado del gas LP, debido a posibles acciones monopólicas y colusión de agentes que manipularon precios, lo que restringió o limitó la oferta y la demanda.
Ahora, la Cofece investiga la existencia de una concentración en gasolineras donde pudo haber prácticas ilícitas, las cuales se relacionan con el proceso de apertura del mercado y fusiones, alianzas y la creación de grandes grupos.
El titular de la Autoridad Investigadora, Sergio López Rodríguez, explicó que desde 2016, cuando se supo la creación de un “club de compras”, que conformó Grupo 500 o G500, en un documento la Cofece consideró que esa alianza debía analizarse como concentración.
En este caso se detectó que hubo una concentración que pudo ser ilícita y es lo que ahora se investiga. “Vamos a comprobar si se hizo esa concentración y tuvo efectos anticompetitivos”, dijo.
La creación del club de compras tuvo por objetivo reducir costos de las gasolinas, mejorar la proveeduría de insumos, logística, ampliar la oferta de combustibles, lo cual no significa una concentración.
Sin embargo, constituyen una conducta anticompetitivacuando las operaciones aumentan el poder sustancial de uno o varios agentes económicos; desplazar a otros competidores o barreras a la entrada de nuevos jugadores, y facilitar la ejecución de prácticas monopólicas.
El titular de la Autoridad Investigadora dijo que si algún grupo gasolinero o empresa, tras la reforma energética, participó en adquisiciones, fusiones, creación de consorcios y alianzas comerciales que pueden impedir la competencia en el mercado pueden acercarse a la Cofece para encontrar una solución, a pesar de que no existe un programa de inmunidad para esta situación.
Por ello, desde el 6 de septiembre de 2017, la Autoridad Investigadora de la Cofece inició la pesquisa al hallar elementos de una presunta concentración, porque puede obstaculizar o disminuir la competencia.
Aunque la indagación comenzó el año pasado, apenas se publicó en el Diario Oficial de la Federación el aviso del inicio de la investigación por denuncia para determinar la existencia de concentraciones ilícitas.
Si se observa que los efectos de concentración tuvieron impacto anticompetitivos, entonces se procederá con multas de hasta 8% de los ingresos de los agentes económicos e inhabilitaciones de cinco años para los directivos que participaron. El Universal.