Por Whatsapp surge una idea que nos pareció interesante en torno a las propuestas del presidente electo de apoyar a los mexicanos con medidas que beneficien su economía, y por eso la reproducimos.
Se trata del cobro que por más de dos décadas ha hecho el Grupo ICA en la autopista Kantunil-Cancún, considerada como una de las más caras en todo el país.
Antes de pensar en el Tren Maya se debió considerar en la liberación de esa carretera de cuota, que inicialmente debió cobrar durante 10 años tras su inauguración, y se liberaría, pero se ha prolongado más del doble.
Además de ICA ¿a quién beneficia desde el poder formal? ¿Por qué siguen cobrando y tan caro después de tanto tiempo?
Hay que considerar que la autopista, de unos 241 kilómetros, no sólo es cara sino también sumamente peligrosa, ya que al parecer la carpeta asfáltica al ser demasiado “porosa” genera ponchaduras de llantas que han cobrado la vida de numerosas personas a lo largo del tiempo.
¿No es hora ya de que se permita el libre tránsito en esa carretera de cuota? Estamos seguros de que en todo este tiempo ya habrán recuperado su inversión y ganado lo suficiente.
¿O es que pretenden que esa carretera sea de cuota para toda la vida? ¿Qué dice don Andrés Manuel López Obrador al respecto? ¿Esto no estaría bueno dentro de sus planes de ayudar el pueblo de México?
Antes del Tren Maya se debió pensar en modernizar esa importante vía como reencarpetar la superficie de rodamiento, mejorar la señalética con tecnología de punta, hacer estaciones de descanso, concesionar espacios para los paradores artesanales, de alimentos, mejorar los entronques a las poblaciones laterales, permitir estaciones de gasolina, considerar talleres mecánicos que incluyan servicio de grúas, llanteras, etcétera.
Esto haría más atractivo el flujo de vehículos de Cancún a Mérida y viceversa ya que por solo por ir y venir tienes que pagar casi $1,000 ($960 según cifras del último aumento), sólo por peaje.
¡Imagínate cuánto ingresan al día porque son miles y miles que van y vienen!
Seguramente que todas estas acciones serían, por mucho, menos costosas, más rápidas y con mayores beneficios para los miles de turistas locales, nacionales e internacionales.
Aquí queda esta propuesta.