Noticias de Yucatán.
Líderes en todo el planeta recibieron
con beneplácito el miércoles la investidura de Joe Biden como nuevo
mandatario de Estados Unidos y el fin de la presidencia de Donald Trump.
En particular recalcan que los problemas más urgentes del
mundo, como la pandemia de coronavirus y el cambio climático, requieren
cooperación multilateral, un enfoque desdeñado por Trump.
Muchos expresaron esperanzas de que Biden enderece a la
mayor democracia de la Tierra dos semanas después de haber visto una turba
de partidarios de Trump irrumpir violentamente en el Capitolio, sacudiendo la
fe de quienes luchan por la democracia en sus propios países.
Gobiernos presionados y sancionados por Trump elogiaron
la oportunidad de un nuevo comienzo con Biden.
Algunos jefes de estado que veían con buenos ojos la mezcla
de nacionalismo y populismo de Trump se mostraron más moderados en sus
expectativas para el gobierno de Biden, y en algunos casos hablaron con
tono nostálgico de los años de Trump.
Pero la oportunidad de reparar alianzas desgastadas y trabajar
juntos para enfrentar problemas globales fue lo que obtuvo más atención
durante el día.
Biden “entiende el valor y la importancia del
multiculturalismo”, dijo el expresidente colombiano y premio Nobel de la Paz
Juan Manuel Santos, que dejó el cargo en el 2018.
“De hecho, si no cooperamos — todas las naciones — para
combatir el cambio climático, pereceremos todos. Así de simple”, dijo.
En Latinoamérica, Biden enfrenta retos inmediatos en asuntos
como la inmigración y en el hecho de que los líderes de los dos países más
populosos — Brasil y México — mantuvieron lazos estrechos con Trump.
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, que fue
uno de los últimos gobernantes mundiales en reconocer el triunfo de Biden, leyó
de una carta que le envió al ahora presidente estadounidense en el 2012, en la
que pidió reorientar las relaciones bilaterales hacia el desarrollo.
El miércoles le mandó un mensaje de felicitación a Biden y
le pidió implementar una reforma migratoria.
“Necesitamos mantener una muy buena relación con el
gobierno de Estados Unidos y no tengo la menor duda de que va a ser
así”, dijo.
El presidente cubano Miguel Díaz-Canel, cuyo país
experimentó un acercamiento de Estados Unidos cuando Biden era vicepresidente,
escribió en su cuenta en Twitter sobre “el vergonzoso legado de Donald Trump
contra Cuba. La aplicación de más de 200 medidas que reforzaron el bloqueo
financiero, comercial y económico, expresión de una política despreciable e
inhumana”.
En Venezuela, el presidente Nicolás Maduro llamó al diálogo
con el gobierno de Biden, al tiempo que expresó esperanzas de que el presidente
entrante abandone la avalancha de sanciones que Trump impuso para
forzar un cambio de régimen.
No obstante, algunos venezolanos, como el contador retirado
Jesús Sánchez, de 79 años, dijeron que estaban desilusionados por la salida de
Trump del poder. Trump respaldó al líder opositor Juan Guaidó, dándoles a
los venezolanos esperanzas de que los días de Maduro estaban contados.
Carlos Vecchio, enviado de Guaidó a Washington y a quien
Estados Unidos reconoce como embajador de Venezuela, tuiteó fotos suyas en la
investidura de Biden. La invitación a asistir fue pregonada por la oposición
como evidencia de que Biden continuará su fuerte apoyo y resistirá los
esfuerzos de Maduro para dialogar, algo que Estados Unidos ha rechazado
categóricamente hasta ahora.
El presidente francés Emmanuel Macron también se refirió a
la necesidad urgente de lidiar con los peligros que enfrenta el mundo por el
cambio climático desde que Trump retiró a su país del Acuerdo de París, un paso
que Biden revirtió en las primeras horas de su presidencia.
Con Biden, “seremos más fuertes para enfrentar los retos de
nuestro tiempo. Más fuertes para construir nuestro futuro. Más fuertes para
proteger nuestro planeta”, escribió Macron en Twitter. “¡Bienvenido de
regreso al Acuerdo de París!”.
En otras partes de Europa, aliados estadounidenses ven
finalmente la oportunidad para un deshielo tras años de tensiones en las
relaciones económicas y de seguridad con el gobierno de Trump.
“Este nuevo amanecer en Estados Unidos es el momento que
hemos estado esperando por mucho tiempo”, dijo la presidenta de la Comisión
Europea, Ursula von der Leyen, diciendo que la llegada de Biden es “prueba
contundente de que, de nuevo luego de cuatro largos años, Europa tiene un
amigo en la Casa Blanca”.
El presidente del Consejo de Europa, Charles Michel, dijo
que las relaciones transatlánticas han “sufrido grandemente en los últimos
cuatro años. En estos años, el mundo se ha vuelto más complejo, menos estable y
menos previsible”.
“Tenemos nuestras diferencias y no van a desaparecer
mágicamente. Estados Unidos parece haber cambiado, y la forma en que es
percibido en Europa y en el resto del mundo también ha cambiado”, añadió
Michel, cuyas críticas abiertas a Trump contrastaron con el silencio
que en general predominó en Europa mientras el republicano estuvo en la Casa
Blanca.
El papa Francisco exhortó a Biden a ayudar a promover
la reconciliación en Estados Unidos y la construcción de una sociedad
“marcada por auténtica justicia y libertad”, y a ver especialmente por los
pobres.
Las “graves crisis” que enfrenta toda la humanidad
piden respuestas con visión de futuro, señaló el pontífice.