Noticias de Yucatán
Familiares de “el Brujo” no saben dónde se encuentra
19/05/2010
DZEMUL.— A tres días de la detención del panista José Guadalupe Tzab Pech, “el Brujo”, el domingo pasado, se desconoce su paradero y los familiares ya lo consideran un “secuestro político tramado por Ivonne Ortega Pacheco”, pues en la Procuraduría de Justicia del Estado dicen ignorar su paradero.
María Leticia Tzab Pech, hermana del “desaparecido”, responsabilizó de forma directa a la gobernadora de lo que le suceda a su hermano y a su familia.
—Él no ha cometido ningún delito, llegó como cualquier ciudadano a votar y fue agredido.
—Sólo platicaba con sus conocidos cuando la unidad 1912 de la SSP llegó para detenerlo, pero se los impidieron policías municipales y los ciudadanos exigieron la orden de aprehensión, ya que violaban la autonomía municipal y que no había un delito en flagrancia.
Los policías llegaron luego de que una persona conocida como “Gallegos” no pudo sacarlo de la casilla y tampoco Felipe Pacheco, primo de la gobernadora, y por eso llamaron a la SSP.
Tras evitar la detención del “Brujo” en la casilla donde votó, los policías municipales lo llevaron a “resguardar” en el Palacio Municipal, a donde 10 minutos después llegaron antimotines y judiciales quienes, sin mediar palabra y con lujo de violencia, lo sacaron.
Con lujo de violencia rompieron la puerta causaron destrozos en el edificio, golpearon a policías municipales y funcionarios, dieron cachazos y culetazos a “El brujo”.
Incluso hicieron tres disparos al aire para amendentrar a los inconformes que llegaron para defender el Palacio Municipal. Sin embargo se les pidió que regresaran a cuidar el voto porque era posible que la detención fuera sólo para robarle la elección al PAN.
Se tenía conocimiento de que en la casilla 110, donde era fuerte el voto panista, los priistas tratarían de violentar el proceso e incluso robar las boletas, y fue allí precisamente donde tratan trataron de detener a Tzab.
—No es posible que niegan saber el paradero de mi hermano, por lo que toda la familia está preocupada y teme por su integridad. Fue un secuestro del gobierno del Estado, pues antes lo despojaron de $10,000, un pulso y soguilla gruesa de oro.
—También los minutos de terror que se vivieron en el Palacio Municipal lo atestiguó el síndico Alejandro Pat Pech, quien vio cuando los Judiciales y otros encapuchados le dijeron “si aprecias tu vida no te metas” mientras lo amenazaban con dos pistolas en la cabeza al mismo tiempo que cortaban cartucho.
—Incluso, un niño de 12 años que filmaba los desmanes de la Policía estatal amenazó con una escopeta para que dejara de grabar con su celular.
—No le tenemos miedo a la gobernadora, si nos va a matar que lo haga, pues es lamentable la situación que se vivió en el municipio y la hacemos responsable de nuestra integridad.
—Al pueblo ya no se le engaña, ya se quitó la venda de los ojos y a pesar de que obligó que los 170 empleados que tienen votaran a la vista, perdieron —expresa Leticia Tzab.
La vecina Suemy Quijano Graniel afirmó que en el pueblo no quieren a Ivonne Ortega, y lo dice sin miedo porque “no estamos para besarle los pies como lo hacen otros.
La madre del detenido, María del Carmen Pech Gutiérrez manifiesta que está preocupada por la integridad de su hijo, lo mismo que su hermano Felipe y su sobrino Nicolás Bacab Tzab, que esperan que pronto lo liberen porque “no ha cometido ningún delito”.
María Leticia Tzab Pech, hermana del “desaparecido”, responsabilizó de forma directa a la gobernadora de lo que le suceda a su hermano y a su familia.
—Él no ha cometido ningún delito, llegó como cualquier ciudadano a votar y fue agredido.
—Sólo platicaba con sus conocidos cuando la unidad 1912 de la SSP llegó para detenerlo, pero se los impidieron policías municipales y los ciudadanos exigieron la orden de aprehensión, ya que violaban la autonomía municipal y que no había un delito en flagrancia.
Los policías llegaron luego de que una persona conocida como “Gallegos” no pudo sacarlo de la casilla y tampoco Felipe Pacheco, primo de la gobernadora, y por eso llamaron a la SSP.
Tras evitar la detención del “Brujo” en la casilla donde votó, los policías municipales lo llevaron a “resguardar” en el Palacio Municipal, a donde 10 minutos después llegaron antimotines y judiciales quienes, sin mediar palabra y con lujo de violencia, lo sacaron.
Con lujo de violencia rompieron la puerta causaron destrozos en el edificio, golpearon a policías municipales y funcionarios, dieron cachazos y culetazos a “El brujo”.
Incluso hicieron tres disparos al aire para amendentrar a los inconformes que llegaron para defender el Palacio Municipal. Sin embargo se les pidió que regresaran a cuidar el voto porque era posible que la detención fuera sólo para robarle la elección al PAN.
Se tenía conocimiento de que en la casilla 110, donde era fuerte el voto panista, los priistas tratarían de violentar el proceso e incluso robar las boletas, y fue allí precisamente donde tratan trataron de detener a Tzab.
—No es posible que niegan saber el paradero de mi hermano, por lo que toda la familia está preocupada y teme por su integridad. Fue un secuestro del gobierno del Estado, pues antes lo despojaron de $10,000, un pulso y soguilla gruesa de oro.
—También los minutos de terror que se vivieron en el Palacio Municipal lo atestiguó el síndico Alejandro Pat Pech, quien vio cuando los Judiciales y otros encapuchados le dijeron “si aprecias tu vida no te metas” mientras lo amenazaban con dos pistolas en la cabeza al mismo tiempo que cortaban cartucho.
—Incluso, un niño de 12 años que filmaba los desmanes de la Policía estatal amenazó con una escopeta para que dejara de grabar con su celular.
—No le tenemos miedo a la gobernadora, si nos va a matar que lo haga, pues es lamentable la situación que se vivió en el municipio y la hacemos responsable de nuestra integridad.
—Al pueblo ya no se le engaña, ya se quitó la venda de los ojos y a pesar de que obligó que los 170 empleados que tienen votaran a la vista, perdieron —expresa Leticia Tzab.
La vecina Suemy Quijano Graniel afirmó que en el pueblo no quieren a Ivonne Ortega, y lo dice sin miedo porque “no estamos para besarle los pies como lo hacen otros.
La madre del detenido, María del Carmen Pech Gutiérrez manifiesta que está preocupada por la integridad de su hijo, lo mismo que su hermano Felipe y su sobrino Nicolás Bacab Tzab, que esperan que pronto lo liberen porque “no ha cometido ningún delito”.
