Con la frente en alto…

Noticias de Yucatán ()

Nadie impune

Publicada: Sábado, 8 de septiembre de 2012 3:00 am  |  Editoriales

Por Daniel Jesús Carrillo Polanco (*)

Por fin se acabó parte de la pesadilla que los meridanos comenzamos a vivir hace cinco años en el estado y en nuestra ciudad: concluyó la administración del “Cómo te quiero”.

Pero como la cosa no debe ser nomás se acabó y todos tranquilos y contentos, es menester que la nueva administración haga todo cuanto tenga que hacer para fincar responsabilidades contra los depredadores del presupuesto, de los bienes públicos y del bienestar de los meridanos.

Dos presidentes municipales priistas en una misma administración y en menos de dos años y ninguno se comportó a la altura de las circunstancias.

Una, la señora Araujo Lara, abandonó el cargo para brincar a otro dando satisfacción a sus intereses personales; el otro llegó, sin que nadie lo hubiera elegido, para terminar la “obra” de la primera: destruir a la ciudad.

Una de dos: o son muy cínicos o de plano no tienen el más ínfimo sentido de lo que significa la calidad y el buen servicio. Me parecieron grotescas las declaraciones del interino que se fue al decir que lo hacía “con la frente en alto”, pese a que entre él y su antecesora dejaron una ciudad llena de huecos y de basura, sin obras de verdad útiles para los meridanos, con mercados abandonados, el alumbrado afectado y una deuda injustificada.

¿Y de todo el daño y perjuicio ocasionado a los meridanos y sus bienes quién responderá? Continuar con la tradición de que quien entra no hace nada contra su antecesor para evitar represalias posteriores significa abonar a la impunidad.

Ni siquiera políticamente se vería bien que ahora, luego de tantas denuncias contra la gestión de los que se fueron, no se proceda en consecuencia; entonces, ¿no era cierto lo que se decía?

Sabemos de las dificultades que se pasarán para que los irresponsables reciban el castigo merecido ya que el sistema de justicia está copado por la misma camarilla de corruptos, pero no hay peor lucha que la que no se hace.

Los meridanos tienen que sentir que existe una autoridad que vela por sus intereses, pase lo que pase. Estoy seguro de que los meridanos sabrán premiar que se actúe con justicia.

No vengan con el cuento de que fincar responsabilidades contra los corruptos sería una “cacería de brujas”, como se le conoce a la represalia sin justificación. Aquí lo injustificable es que no se proceda y se haga como si nada hubiera ocurrido.

Los daños y los perjuicios no deben quedar impunes. La democracia no sólo es votar, también implica exigir que quienes tienen en sus manos el presupuesto público lo ejerzan con rectitud y honestidad, y si esto no ocurre, entonces merecen un castigo legal, político y social.

Y digo que se acabó parte de la pesadilla porque aún le queda un mes a la gobernadora. Ya veremos qué nos espera con el sucesor de la silla grande que sigue sin decir “esta boca es mía”, para sancionar a los corruptos que dejan a Yucatán desfondado y saqueado.— Mérida, Yucatán.

dajecapo@hotmail.com
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*) Maestro en comunicación política y marketing electoral y consejero estatal del PAN