Noticias de Yucatán
Funcionarios católicos en Italia han amenazado a ex monaguillos del Papa con acusarlos de difamación penal por haber denunciado públicamente a un seminarista por mala conducta sexual cuando convivían en el seminario juvenil dentro del Vaticano.
Abogados de la diócesis de Como advirtieron a un programa de TV de investigaciones periodísticas que no debe informar sobre las denuncias de los jóvenes y aparentemente presionaron a un jerarca de la Iglesia para que se retracte de su insinuación de que hubo un encubrimiento.
La reacción es indicativa del nerviosismo que provocan las denuncias de sexo gay entre los monaguillos del Vaticano en la Santa Sede y en la Iglesia italiana. La reacción ha sido particularmente fuerte en la pequeña asociación católica Opera Don Folci, que regenta el seminario juvenil San Pío X en un palazzo a pocos pasos de la residencia del papa Francisco.
Una decena de niños, algunos de 13 años, viven en la residencia y sirven de monaguillos en las misas papales en la Basílica de San Pedro.
Las acusaciones implican a un ex seminarista, ahora un joven cura de la diócesis de Como y miembro de la Opera Don Folci. Un antiguo estudiante dijo al periodista Gaetano Pecoraro que el seminarista entraba a su dormitorio por la noche para exigir sexo oral, desde que tenía 13 años y hasta que cumplió los 18.
El seminarista era un año mayor y tenía una posición de autoridad sobre los demás estudiantes, según el ex estudiante, identificado como Marco.
El compañero de cuarto del estudiante, Kamil Jarzembowski, dijo que presenció decenas de incidentes. Los denunció a las autoridades del seminario, luego por escrito a varios cardenales y finalmente al Papa en 2014. Funcionarios eclesiásticos dijeron que se realizaron investigaciones, aunque al principio sin tomar declaración a los niños, y se determinó que las denuncias eran falsas.
El seminarista acusado fue ordenado sacerdote a principios de este año. Ninguno de los acusadores ingresó al sacerdocio.
Los ex estudiantes han publicado sus denuncias en un libro y en el programa de TV Le iene (las hienas).
El Vaticano anunció el 18 de noviembre que reabría la investigación debido a la aparición de "elementos nuevos" y que quería "echar plena luz sobre lo que realmente sucedió".
Anteriormente, la Opera Don Folci en su sitio web calificó las acusaciones de "violento ataque a la iglesia" y meras "calumnias y falsificaciones".
Un abogado de Don Folci, Riccardo Rolando Riccardi, escribió a un estudiante en una carta del 17 de noviembre, a la que tuvo acceso The Associated Press, que se presentara a declarar, amenazándolo con acusarlo de difamación. Riccardi no respondió a los pedidos de declaraciones y los teléfonos en la página web de su firma no estaban en servicio.